Paula Vázquez, de vacaciones en Galifornia
La presentadora ferrolana disfruta de su ciudad natal y sus alrededores después de unos días de vacaciones en Los Ángeles
Si le dieran a escoger, Paula Vázquez probablemente elegiría Galifornia antes que California. La presentadora y actriz, que este verano ha aprovechado para visitar la costa oeste de Estados Unidos, no ha podido evitar acordarse de su Galicia natal mientras disfrutaba de sus vacaciones. Tanto es así que estas semanas ha estado por el entorno de Ferrol para curarse la morriña en compañía de los suyos.
Paula aprovecha siempre que puede para volver a su tierra. Conoce prácticamente todos los rincones de la comunidad, como ha dejado patente en sus redes sociales, pero si tuviera que quedarse con uno, ése podría ser las Rías Altas. Los acantilados de Cedeira, el santuario de San Andrés de Teixido o Cariño, pero sobre todo Ferrol y sus playas es lo que le tira.
En la playa de Pantín, un paraíso que comparte con el cantante Andrés Suárez, está el que considera “el puente de su vida” y, en la de Campelo, el agua está casi tan fría para ella como el aparato de crioterapia que tuvo ocasión de probar en su visita a Los Ángeles.
Otros “puentes” que a todo el mundo le gusta inmortalizar son los de la playa de las Catedrales, en Lugo. Los tirantes de piedra conforman un paisaje único, pero también los agrestes acantilados de la costa cantábrica, por donde también se ha dejado ver.
Algo más lejos de allí, en el castillo de San Felipe, en la bocana de la ría de Ferrol, Paula Vázquez hizo gala de su galeguidade, coincidiendo con el Día de Galicia –el 25 de julio– marcándose una muiñeira y dejando claro que si de algo podemos presumir los gallegos es de cultura y tradición, además de paisajes de ensueño.
Estos días, sin embargo, era más frecuente encontrársela por la calle Real de Ferrol en compañía de su padre. En la arteria principal de la ciudad, en pleno barrio de la Magdalena, flanqueada por imponentes edificios modernistas, la actriz gallega disfruta del tiempo libre que su trabajo le permite. La ciudad departamental es su refugio siempre que regresa a Galicia.
