El caballo de Troya comunista del Gobierno de España
La doble vara de medir y la hipocresía política de Unidas Podemos respecto a la invasión rusa de Ucrania es inaceptable
¡Unidad europea, sí, por fin!. Está vez la burócrata y tecnócrata Europa si está respondiendo al unísono con unidad y capacidad resolutiva ante un gravísimo e incierto conflicto. Por eso mismo, la doble vara de medir y la hipocresía política de Unidas Podemos es injustificable e inaceptable en su posicionamiento con el conflicto armado derivado de la invasión rusa de un país libre como Ucrania. Debo decir que en un primer momento el posicionamiento de la Unión Europea me pareció débil, aséptico, en la línea de una Europa decadente y frívola a la que estamos tan acostumbrados. Pero con el paso de los días me congratuló que mi primera impresión no fuese acertada.
Ha costado, y mucho, liberarnos de prejuicios y complejos, pero esta vez sí, la Unión Europea está intentando responder unida y con capacidad resolutiva, ante la verdadera imagen de un dictador, Putin, a semejanza de otro tirano como fue en su momento, Stalin.
Yolanda Díaz se desmarca de su propia bancada buscando únicamente su supervivencia
Se han acabado los carnavales y se caen las caretas. Las primeras en caer y ver su verdadero rostro son la de los comunistas que gobiernan España con la complicidad y conveniencia del PSOE. Y ahora ya sin ningún tipo de maquillaje ante una opinión pública que rechaza contundentemente la hipocresía y cinismo de unos personajes que jamás deberían haber llegado a gobernar nuestro país.
No me sorprende en absoluto la frivolidad y el doble juego de una Yolanda Díaz cuya credibilidad política es ya ninguna. La ministra comunista que viste de Chanel y vive en su pisazo en Madrid, con servicio incluido, y pagado con nuestros impuestos, se desmarca de su propia bancada buscando únicamente su supervivencia política y dejando cristalinamente en evidencia su único interés unipersonal. Así son y así se comportan estos defensores de lo social: de pena.
El díficil reto de Núñez Feijóo
Pero también ha sido la semana de Feijoo, al que deseo lo mejor, por supuesto, aunque le adelanto que fácil no lo va tener. Una cosa es que sus cargos públicos y orgánicos le aplaudan hasta con las orejas -como no, cuando el sueldazo de fin de mes va en ello- y otra bien distinta es que el posible votante del Partido Popular vea en él un líder carismático y una alternativa creíble y sólida a Sánchez. Lo iremos viendo.
Uno de los primeros problemas a solucionar para Feijóo es desprenderse de una chusma de palmeros
Llama la atención las manifestaciones en redes sociales de cargos públicos de dicho partido que hasta hace unos días decían y pensaban lo contrario y ahora le juran lealtad suprema al nuevo líder. Lógicamente, para mantener intactos sus cargos y sus privilegios. Qué panda de estómagos agradecidos vitalicios alimenta el Partido Popular sin necesidad alguna, en fin.
Por ello mismo debo aplaudir la coherencia política y moral de Pablo Montesinos, al anunciar su dimisión y renuncia a sus cargos orgánicos y su escaño. El único que demuestra con ello que no ha ido a la política a vivir de ella, ni a servirse de la misma. Los demás únicamente me producen vergüenza ajena y mi rechazo personal.
Precisamente ese es uno de los primeros problemas a solucionar de Feijoo: desprenderse de toda esa chusma de palmeros y vividores de lo público. Ni le aportan nada, ni aportan nada a la sociedad.
Finalizo manifestando mi preocupación por una escalada de precios en carburantes, energía, materiales y alimentación que va dejar a más de la mitad de las familias de media España en una situación muy difícil y frágil económicamente. Espero que el Gobierno de España reaccione y empiece a bajar impuestos e IVA a determinados productos básicos. Si así no lo hiciera, derivaría a empresas y familias a una situación económica insostenible. Hoy, el interés general, y la altura de miras, debe predominar por encima de ideologías. Eso espero y esperamos.