Tres empresas, investigadas por importación de madera ilegal en Galicia
La Xunta espera cerrar "en corto plazo" los expedientes abiertos a tres empresas, una de ellas portuguesa, por la entrada de madera ilegal
La Xunta se pone las pilas. El director xeral de Ordenación Forestal, Tomás Fernández-Couto, ha informado de que el Gobierno gallego mantiene abiertos expedientes que investigan a tres empresas por la supuesta entrada en Galicia de madera de talas ilegales, que pueden conllevar «una sanción». Así lo ha contestado en la comisión de Ordenación Territorial del Parlamento gallego, en la que la diputada del PSdeG Patricia Vilán ha preguntado por la alerta de Greenpeace de que a finales de 2017 al menos un barco cargó madera ilegal en Paranagua (Brasil) con destino al puerto de Vigo a través de la empresa brasileña Madeireira Cedroarana.
El Reglamento de la Madera, conocido como EUTR (European Union Timber Regulation) entró en vigor en 2013, con transposición en España desde finales de 2015, y tiene como objetivo establecer las obligaciones de las empresas que comercializan productos forestales para evitar la entrada en la Unión Europea de madera procedente de talas ilegales.
Complejidad
El responsable de Ordenación Forestal señala que la transposición de la normativa europea es un «sistema complejo», mientras aún se está en una «primera fase» de «informar» y «trasladar información a los distintos agentes que se les aplica», como puede ser un primer importador, véase un rematante que compra madera. Así, se ha requerido información a tres empresas, de las cuales una de ellas ya ha facilitado datos, sobre la que ha dicho que, «en principio, parece una documentación adecuada».
Sin embargo, «más compleja» es la situación de las otras dos compañías (una de ellas portuguesa, por lo que tendría que hacerse cargo de los controles el gobierno luso, según ha expuesto), que «están alegando que no son agentes y no son objeto de control por EUTR (la normativa europea contra las talas ilegales)». Los tres casos están «en tramitación» desde febrero de este año.
La matanza de Colniza
Fernández-Couto ha explicado que en las distintas autonomías se elabora un plan regional de controles de entrada de madera ilegal para aplicar «a partir de este año». Y es que «en poco tiempo habrá unos sistemas muy organizados», ha dicho, pero en estos momentos hay «muchas dudas» porque «es una normativa compleja». Además, «es muy dificultoso una relación de importadores» de madera, ya que «no hay una lista».
Al respecto, Patricia Vilán ha expuesto que recientemente se ha cumplido un año de la matanza de Colniza (Brasil) en la que asesinaron a nueve labriegos para talar ilegalmente madera en Amazonia. Sin embargo, lamenta que hay información «muy opaca» sobre la entrada de madera en la comunidad gallega, mientras se queja a la Xunta de que «la sensación es que van ustedes muy lentos» con la transposición de la normativa, pues «en dos años y medio» aún están «en una primera fase de información» a agentes.