Las madereras denuncian el «tasazo» de seis municipios de Lugo
Cargan contra nuevas ordenanzas municipales que, a su juicio, se han llevado a cabo por una “extralimitación de competencias de los concellos”
Las asociaciones gallegas de empresarios de la madera han criticado las ordenanzas forestales municipales por la imposición de “tasas discriminatorias para la actividad forestal” mediante una “extralimitación de competencias de los ayuntamientos”.
La protesta se refiere a las ordenanzas publicadas en los municipios de Meira, Pol, Ribeira de Piquín, A Pontenova, Riotorto y A Pastoriza, todos en la provincia de Lugo. Las entidades apuntan que esto significa “un impuesto más a la propiedad forestal, discriminando al sector de la madera con respecto a otros sectores primarios que se desarrollan en el mismo territorio y que no sufren esta penalización”.
Desde las organizaciones remarcan la necesidad de mantener en buen estado las pistas y repararlas si es necesario, y que el cobro de tasas por ejecutar la actividad “no lo garantiza”, ya que las claves para la compatibilidad de la actividad forestal y la conservación de las vías son “la responsabilidad empresarial y la mejora de la organización de la propia actividad dentro de cada municipio”.
Así, las entidades reclaman que se organice dicha actividad a nivel municipal y que se adapten las vías a la evolución de la maquinaria forestal. Seguirían de esta manera el ejemplo de algunos ayuntamientos que “ya marcan las vías adaptadas para la saca de madera, la creación de parques de madera y puntos de acopio, etc.”.