La flota gallega celebra las cuotas para 2020: "Pudo ser mucho peor"

La flota gallega considera «razonablemente positivos» los resultados de las negociaciones en Bruselas de los TAC y cuotas para 2020, ya que «pudo ser mucho peor» por la posición de recortes de la que se partía. El portavoz de Acerga, la asociación mayoritaria del cerco gallego, Andrés García, valora que la rebaja del 40% de jurel para la zona del Cantábrico «se compensará con la posibilidad» de obtener de otras zonas. Mientras, «desaparece la amenaza de bajada» de jurel para la zona del sur de Fisterra, que «sería catastrófica», pues se consigue un incremento del 24%.

Además, sube un 41% la caballa para el Cantábrico, aunque hay un retroceso del 3% para la anchoa. «Las expectativas eran muy malas, por lo que parece que se llegó a un buen acuerdo», afirma Andrés García. Por su parte, el secretario xeral de la Fundación Rendemento Económico Mínimo Sostible e Social (Fremss), Torcuato Teixeira, ha remarcado que la pesca del Cantábrico «no salió tan mal parada como había salido otros años». Opina que el acuerdo es «satisfactorio», aunque «no se pueden echar las campanas al vuelo», pero «pudo ser mucho peor».

Rebajas en el Cantábrico

Identifica como «una mala noticia» la rebaja del 40% de jurel en el Cantábrico, porque «es muy drástica de un año para otro», si bien «se puede compensar con mecanismos de flexibilidad para traer jurel de otras zonas que sobren».

Tampoco «es una buena noticia para el Cantábrico» la disminución del 5,5% de merluza del sur, porque «es una cuota que se suele consumir», mientras «arrastre, volanteros y palangreros necesita cuota de esa especie».

Fin a la veda de la cigala

Pero Torcuato Teixeira sí reconoce la «muy buena noticia» de subida del 40% de la caballa, el alza del jurel del sur y del gallo. También es «realmente importante» que «se pueda reconsiderar la decisión inicial de tres años más de veda de la cigala» para que vuelva a las lonjas en el futuro.

El gerente de la Organización de Productores Pesqueros (OPP) de Lugo, Sergio López, se refiere a la evaluación contrapuesta entre la cosecha «positiva» de esta reunión en Bruselas para la flota de litoral (arrastre, cero y artes varias), frente a la flota de A Mariña que faena en el Gran Sol, que está «decepcionada».

Es «bueno» para los barcos de litoral el aumento del 41% de la caballa, que la merluza casi no baja (estima que «con las flexibilidades y obligaciones de desembarque puede quedar prácticamente en un menos 3%»), que el jurel «aguanta» por los intercambios y «incremento» del gallo.

La frustración del Gran Sol

Sin embargo, lo alcanzado «es una pena» para el Gran Sol. «Pensábamos que se iba a conseguir algo y no se consiguió nada», lamenta Sergio López. Sobre este extremo, se refiere al recorte del 20% en la merluza en esta zona, la «especie principal en facturación», si bien recuerda que el año pasado se incrementó en la misma tasa, por lo que se vuelve a cifras de hace dos años. Además, recuerda que este año no se consumió la cuota, «pero no se sabe cómo va a ser el año que viene».

El presidente de los Armadores de Vigo (ARVI), Javier Touza, reconoce un balance «positivo», con «una suavización de los fuertes recortes» que se preveían tras «una dura negociación». También subraya como «positivo» haber actuado de forma «coordinada con Reino Unido, Holanda y Bélgica», mientras se consiguen este año «más toneladas» de capturas para Galicia que en 2019.

Pese al recorte de merluza sur, que pescan unos 1.200 barcos gallegos, cree que es «un muy buen logro» paliar la bajada de la que se hablaba en un principio, del 20%. Touza ha explicado que la negociación de este año es «bastante especial», dado que en 2020 debe alcanzarse el rendimiento máximo sostenible. También llama la atención sobre que la flota gallega pasó en la última década de cinco especies en rendimiento máximo sostenible a un total de 59, tras haber realizado un «gran sacrificio».