Roures apuesta por desgastar a las radios tras el paso atrás de Vocento
Tras la negativa de Punto Radio al acuerdo para retransmitir el fútbol, el propietario de Mediapro apuesta por mantener la batalla hasta que pase factura a los 100 millones de ingresos por publicidad que, según sus cálculos, el deporte rey genera a las emisoras
“Sin novedad en el frente”, dicen desde los cuarteles de Jaume Roures. Mediapro, el dueño de los derechos de retransmisión del fútbol, ha cambiado rápidamente de estrategia para ganar la batalla del fútbol. Con la negativa en el último momento de Punto Radio a firmar un acuerdo cuyas bases ya estaban totalmente cerradas, Roures ha perdido una batalla, pero fuentes cercanas al empresario catalán aseguran que la guerra sigue abierta y que la ganarán porque tienen la ley de su parte.
El pasado viernes, la Liga de Fútbol Profesional (LFP), que actúa como mero intermediario entre Mediapro y los clubes en este conflicto, emitió un comunicado en el que aseguraba que estaba negociando con Punto Radio para permitir su acceso a los estadios. De hecho, la nota aseguraba que la LFP estaba acreditando a los periodistas de la cadena del Grupo Vocento.
Sin embargo, Vocento, que llevaba varias semanas negociando los términos del acuerdo, se echó para atrás esa misma tarde a pesar de que en la LFP tenía la solicitud de acreditación firmada por el responsable de deportes de la cadena. El consejero delegado del grupo puntualizó que la postura era escuchar la propuesta de la LFP y en ningún caso sentarse a negociar un acuerdo.
La cadena de Vocento ya había avanzado sus intenciones en boca de su responsable de deportes, José Antonio Abellán, que avisó de que la Ley daba la razón a la LFP –es decir, a Mediapro, que es la dueña de los derechos- y que él solicitaría a su grupo que entablase negociaciones con la Liga.
Cambio de estrategia
Ahora, según fuentes de toda solvencia, ya no hay conversaciones entre la LFP y las cadenas radiofónicas. Dicho de otra forma, Roures ha cambiado de estrategia a la vista del no de Vocento y de la postura beligerante de otras cadenas medianas como Radio Marca o las autonómicas con las que Mediapro quería alcanzar un acuerdo para obligar a las grandes –La Ser, la Cope y Onda Cero- a desbloquear el boicot.
Ahora Roures quiere desgastar a las cadenas. ¿Cómo? Dejando que pasen los días y que los datos de audiencia y por lo tanto los ingresos de las emisores desciendan de forma significativa. Desde Mediapro entienden que la calidad de las retransmisiones han sufrido un importante bajón ya que no las cadenas no cuentan con profesionales en los estadios y creen que sus hoy enemigos no podrán aguantar mucho esta situación.
Cien millones en juego
“El tiempo juega a nuestro favor”, asegura desde su entorno. Mediapro calcula en 100 millones de euros los ingresos publicitarios que generan las retransmisiones radiofóicas de los partidos. No obstante, creen que aún es pronto para valorar el desgaste que en términos económicos está suponiendo esta batalla.
Lo cierto es que desde alguna de las cadenas que se oponen frontalmente a la negociación para pagar el canon se empieza a lanzar el mensaje de que sí podrían pagar por algunos servicios que ofrecen los clubes de fútbol, como la utilización de cabinas o las entrevistas a pie de campo.
En una batalla que perjudica a las dos partes, las emisoras y el dueño de los derechos están obligados a buscar una solución. Al menos ya hay un punto de partida. A cambio de romper el veto de las radios en los campos de fútbol, la LFP había ofrecido a Punto Radio un contrato muy ventajoso, que contenía una rebaja muy sustancial entre el 25% y el 50% sobre los 150.000 euros mensuales -1,2 millones al año por los meses de competición- de canon fijo marcado de salida por Mediapro.