El negocio de Tegasa, como los huevos, mejor en muchas cestas
La Cambra de Barcelona ha asesorado a esta empresa especializada en nutrición animal en la venta de sus productos en países como Egipto, Ecuador o Bangladesh
¿Por qué una empresa debe internacionalizar sus servicios? Pablo Masiá, gerente de Tegasa, especializada en nutrición animal, lo explica con una metáfora muy oportuna: «Siempre viene bien poner los huevos en muchas cestas», asegura.
Esta compañía con medio siglo de vida (fue fundada en 1965 por el padre del actual director junto a varios socios) ha apostado en la última década por salir al extranjero, a través de mercados tan diversos como Egipto, Bangladesh, Filipinas, Sri Lanka o Ecuador. Una estrategia que ha permitido consolidar una facturación anual cercana a los diez millones de euros.
En busca del equilibrio
A comienzos de la primera década de este siglo, Tegasa ya tenía una larga experiencia en el mercado español. A partir de la distribución de productos veterinarios con los que dio sus primeros pasos, esta compañía catalana pasó a desarrollar sus propios correctores vitamínico-minerales, pre-mezclas de aditivos y piensos de primeras edades para todo tipo de animales de ganadería.
Hace ahora doce años, decidieron dar el salto al exterior con la motivación de seguir creciendo en el negocio, pero también en busca del equilibrio.
«Si tienes una crisis profunda en un mercado, pero tienes presencia en otros, la sufrirás menos», explica Masiá.
Misiones de la Cambra de Barcelona
Gaële Bielkin, Export Manager de la compañía, recuerda cómo en esos primeros años resultó de gran ayuda la Cambra de Comerç de Barcelona. A través del programa de misiones comerciales que esta entidad ofrece, Tegasa puso un primer pie en lugares como China, Túnez o Marruecos, países donde ha continuado creciendo en los últimos años.
Bielkin destaca cómo este tipo de viajes permiten un primer acercamiento a los potenciales clientes de la compañía. Es decir, granjeros y distribuidores locales a los que, de otra forma, sería mucho más difícil llegar para establecer una relación comercial.
Adaptarse al cliente
Tal y como reiteran desde esta empresa que emplea a 28 trabajadores, su ventaja competitiva reside en «la capacidad para adaptarnos a nuestros clientes». A diferencia de otras empresas del sector de nutrición animal, Tegasa opta por ofrecer un producto personalizado y adaptado a las necesidades del mercado y del cliente.
Se trata de un factor que, según explica Bielkin, también resulta de gran utilidad cuando hay que «adaptarse a mercados tan variados» como en los que actualmente trabajan.
Soportar las crisis
A pesar de las aventuras que han iniciado en los últimos años, Pablo Masiá destaca «la prudencia» y la tranquilidad con la que han tratado de caminar en estas nuevas y desconocidas rutas, como complemento a un mercado nacional ya consolidado.
Tal y como explica Masiá, el impacto de la crisis del último lustro en un sector como el ganadero es relativo. «Aquí sufrimos crisis cada año», comenta este empresario. La continúa fluctuación de las materias primas –causadas por malas cosechas o por la simple especulación en los mercados de valores con sus precios— y las variaciones en los precios de la carne sitúan en alerta permanente a los fabricantes de pienso, ganaderos o empresas suministradoras como Tegasa.
De ahí la importancia de mantener la calma y el negocio en más de una cesta: para que, en caso de que uno de los huevos se rompa, poder estar seguros de que tenemos otros para comer.