Albert Rivera no se arruga y exhibe músculo en Andalucía
Asegura que los andaluces están premiando la actitud "responsable" de Ciudadanos al no facilitar la investidura de Susana Díaz
La dirección de Ciudadanos se siente fuerte, pese a las críticas recibidas desde todos los ángulos. El PP no deja de arremeter contra ellos, y el PSOE desconfía, porque ha colocado el listón muy alto en Andalucía.
Y eso le complica la vida en el resto de comunidades autónomas y ciudades, de cara a garantizar gobiernos estables tras las elecciones del 24 de mayo. Su líder, Albert Rivera, incansable, cada día en una ciudad distinta, no desea cambiar de dirección. Y ha asegurado que los andaluces están premiando «la actitud responsable de Ciudadanos», tras conocer los datos de una encuesta en la que el partido saldría beneficiado si se convocaran unas nuevas elecciones en Andalucía.
La suma de comportamientos individuales
Se trata de un riesgo alto. Pero la primera en asumirlo sería la presidenta en funciones de la junta de Andalucía, Susana Díaz, que sigue jugando con esa posibilidad. En un sondeo de Metroscopia, para el diario El País, Ciudadanos pasaría del 9,3% de los votos, al 15,5%, con lo que superaría los 9 diputados que consiguió el 22 de marzo.
Con ese nuevo adelanto electoral, el partido que más perdería sería el PP, y el PSOE mejoraría sus 47 diputados. En cualquier caso, nadie desea llegar a esa nueva situación. Lo que ocurre también es que, a pesar de que nadie, individualmente, quiera llegar tan lejos, la suma de los comportamientos individuales puede llevar a unos nuevos comicios.
Acuerdos «uno a uno»
Ciudadanos quiere que el ex presidente de la Junta, Manuel Chaves, dese su escaño en el Congreso, y reclama al PSOE un compromiso por escrito para abstenerse en la investidura de Susana Díaz, que necesitaría un segundo grupo, que no podría ser otro que Podemos. Esa petición de Ciudadanos le llevará a plantear exigencias similares a otros partidos, particularmente al PP, cuando se compruebe que sus diputados son indispensables para formar gobiernos en la mayoría de comunidades autónomas.
Fuentes de Ciudadanos insisten en que no plantearán acuerdos globales, que desean solucionar los casos «uno a uno», y en función de las necesidades de cada territorio. Pero que en Andalucía «el PSOE no ha querido comprometerse por escrito a nada».
Todos pendientes de Ciudadanos
«Según las encuestas, podríamos ser los más interesados en no mover ficha para obtener un mejor resultado en las próximas elecciones», ha asegurado Juan Marín, el hombre fuerte de Ciudadanos en Andalucía. «No hemos hecho eso. Hemos aceptado sentarnos a dialogar y plantear nuestras condiciones y se equivoca Susana Díez si cree que Ciudadanos variará su posición por su amenaza de elecciones», ha añadido.
Todas las miradas están depositadas en Ciudadanos. Al margen del acierto que puedan tener las distintas encuestas realizadas, el partido de Albert Rivera está llamado a cumplir un papel determinante. Le pese o no al PP, que sigue considerando a la formación como un posible complemento, en parte porque es consciente de que Ciudadanos se alimenta de electores del PP que pasaron a la abstención y que ahora creen que han encontrado su formación ideal.