Una OPV para tapar el ladrillo de Botín
El Santander espera captar en bolsa los fondos para acabar el saneamiento de los activos problemáticos
“El ladrillo será agua pasada en diciembre”. Así respondió el consejero delegado de Banco Santander, Alfredo Sáenz, a las reiteradas preguntas sobre los activos dudosos incrustados en balance.
En la presentación de los resultados del primer semestre, la mano derecha de Emilio Botín aseguró que rematarían la operación limpieza en lo que queda de año y parece que la salida a bolsa en México y Estados Unidos de la filial centro americana es uno de los mecanismos elegidos para ayudar a muñir el colchón de las provisiones.
Hasta ahora, esta tarea ha lastrado contundentemente el beneficio. Para muestra, un botón. De enero a junio, las ganancias cayeron el 51% por las provisiones exigidas en los dos decretos Guindos sobre la solvencia de la banca.
En esa misma rueda de prensa –la de resultados–, Sáenz desmintió que estuviera cocinando la oferta pública de acciones (OPV) de la filial mexicana del Santander.
Capital
Sin embargo, este jueves, la institución financiera, que salva los resultados gracias al exterior, anunció que pondrá entre el 25% y el 30% del capital a fluctuar en el mercado mexicano y en el estadounidense. La operación reportará 3.200 millones de euros (unos 4.000 millones de dólares), según Bloomberg.
La cantidad a ingresar coincide con las necesidades de capital requeridas para sanear totalmente el ladrillo problemático. El banco de Botín ha cubierto el 70% de los requerimientos, por lo que tiene pendientes 2.640 millones.
Sin embargo, en el esquema de futuro que se maneja en la Ciudad Financiera de Boadilla del Monte (Madrid) se espera una tercera ronda de provisiones. El excedente de la operación y las plusvalías originadas en la venta de la cartera de seguros (490 millones) daría margen para limpiar totalmente el balance.
Provisiones
Por el momento, el Santander tiene que provisionar 8.800 millones, según los cálculos derivados por los reales decretos aprobados por el Gobierno en febrero y mayo. Hasta ahora ha cubierto 6.160 millones.
En lo que respecta a la OPV mexicana, Citigroup, JPMorgan Chase, Deutsche Bank y el propio Santander serán las entidades encargadas de llevar a cabo la operación, que se producirá entre octubre y noviembre, a tiempo para cumplir con el ladrillo.