Santander, BBVA, Caixabank y Sabadell destruirán 15.000 empleos este año
Tras una la banca acaba en movilizaciones por el riesgo de exclusión financiera en poblaciones del rural
El recorte de BBVA, Santander y Caixbank agravará la situación de exclusión financiera en los municipios gallegos
La banca lleva más de una década a régimen. La reestructuración que comenzó en la crisis financiera y que continuó con el proceso de digitalización se llevará por delante este año 15.000 empleos solamente en los grandes bancos.
SANTANDER. ha dado salida este año a 3.600 empleados y ha cerrado un millar de oficinas. El banco de Ana Botín encadena años redimensionando su red, en parte debido a la absorción del Popular.
CAIXABANK. La nueva CaixaBank, una vez incorporada Bankia, quiere dejar marchar a algo más de 6.400 empleados, a los que ofrece unas condiciones lo suficientemente buenas como para haber recibido más de 8.200 peticiones, que se resolverán antes del 20 de septiembre.
SABADELL. El Banco Sabadell ha sido el último en anunciar esta misma semana un ajuste de en torno a 1.900 empleados y unas 320 oficinas que hará antes de que acabe el año, gran parte de los cuales (unos 1.800) ya se esperaban.
BBVA. tiene previsto dar salida a 2.935 personas y cerrar 480 oficinas en 2021, ambas cosas solo en España.
A estos 15.000 empleos, aún habría que sumar las salidas derivadas de la fusión de Unicaja y Liberbank, que según los sindicatos podrían rondar el millar.
Movilizaciones y exclusión financiera
El proceso de concentración del mapa de entidades bancarias y el recorte de la red de oficinas ha provocado un deterioro de los servicios presenciales a la ciudadanía, en favor del canal digital. Esta transformación está generando problemas obvios en la población más mayor, agravados en las zonas rurales por la pérdida de las sucursales que permanecían abiertas, una situación de exclusión financiera disimulada por las entidades a base de cajeros y oficinas móviles.
En las últimas semanas se han producido en Galicia numerosas protestas por el cierre de oficinas de Abanca en algunas localidades. El banco de Juan Carlos Escotet es el de mayor capilaridad en la comunidad y calve para evitar que muchos municipios del rural se queden sin servicio presencial.
