Portugal sonríe a Abanca: es más rentable que en España y ahora con estabilidad política

El grupo que preside Juan Carlos Escotet supera ampliamente los objetivos de negocio en Portugal, donde la rentabilidad crece más que en España

Juan Carlos Escotet y Francisco Botas, presidente y consejero delegado de Abanca / EFE

Juan Carlos Escotet y Francisco Botas, presidente y consejero delegado de Abanca / EFE

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Abanca está inmersa en una etapa de crecimiento, acelerada por las adquisiciones de otras entidades en sus mercados de referencia, España y Portugal. Los resultados presentados este miércoles por Juan Carlos Escotet muestran un volumen de negocio por primera vez de más de 100.000 millones, un 18,8% más, facilitado por las integraciones de Bankoa y Novo Banco.

El presidente de la entidad destacó una evolución especialmente positivo en Madrid, País Vasco y Extremadura, pero también en Portugal, donde engulló la red de Deustsche Bank y de Novo Banco y donde ha pulverizado sus propias previsiones.

Las hipotecas formalizadas alcanzaron los 134 millones, un 58% por encima del objetivo fijado por la propia Abanca; mientras que las formalizaciones fuera de balance se situaron en los 1.102 millones, un 26% más de lo esperado.

Todo parece ponerse de cara en el país vecino, que también ha superado las expectativas de crecimiento con un aumento del PIB del 4,9%, la mayor subida en 30 años, y tiene menos de la mitad de tasa de paro que España. A esto hay que sumar que abre una etapa de estabilidad política debido a la mayoría absoluta del socialista Antonio Costa.

El primer ministro portugués, Antonio Costa. EFE/EPA/MANUEL DE ALMEIDA

Mayor rentabilidad

El mercado portugués también crece más rápido que el español en rentabilidad. Según los datos de Abanca, el margen de intereses se elevó un 17,3%, frente a la media del 4,9% del conjunto del grupo financiero. Los ingresos por prestación de servicio aumentaron un 12,3%, dos puntos por encima de la media.

Este escenario hace que Abanca haya vuelto a poner los ojos en el país vecino y retomar las negociaciones para absorber Eurobic, cuya compra había descartado en 2020. «En Portugal hay un sistema bancario muy saneado y tasas de crecimiento interesantes» admitió Escotet .

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