MoraBanc y Andbank forman parte de las sospechas de blanqueo de la mafia china
Un directivo de BPA asegura que la policía española investiga ambas entidades desde 2011, cuando ellos "decidieron cortar" con el mafioso Gao Ping
El cabecilla de la trama mafiosa que investiga la operación Emperador, Gao Ping, también habría blanqueado dinero en Andorra a través de Andbank y MoraBanc. La revelación la ha hecho pública el ex subdirector de negocio internacional de Banca Privada de Andorra (BPA), Pablo Laplana, que ha tirado de la manta en una entrevista radiofónica.
«He tenido acceso a todas las causas excepto las que están bajo secreto de sumario y en ellas aparecen intervenciones telefónicas con gestores de otros bancos de Andorra», responde Laplana a la emisora local de la cadena SER.
«Concretamente, en el caso de Gao Ping, queda constatado que BPA decide cortar la operativa en 2011 y que, con posterioridad, las intervenciones reflejan que este señor opera directa o indirectamente con MoraBank y Andbank», asegura Laplana.
Investigación de los fiscales
Las declaraciones del ex directivo de Andbank encajan con las sospechas de los fiscales del caso Emperador, que intentan demostrar que Ping usó el sistema financiero andorrano a su antojo para centrifugar los capitales procedentes de actividades delictivas en España (concentradas en la zona de Girona).
En la misma entrevista, Laplana señala que las sospechas de Estados Unidos (EEUU) sobre BPA «se basan en documentación incompleta». La duda que manifiesta el banquero es «quién ha hecho llegar esos informes al Tesoro estadounidense».
Críticas al Gobierno andorrano
El primer miembro de la cúpula de BPA que habla abiertamente sobre la intervención del banco y las sospechas de blanqueo también se detiene en analizar la actitud del Gobierno andorrano. Está convencido de que el presidente, Antoni Martí, y el ministro de finanzas, Jordi Cinca, conocían el contenido del informe de EEUU antes de que se hiciera público.
«La nota ya reconocía la colaboración del Gobierno» antes de que estallara el caso. Según él, «si se colabora bien se sabe en lo que uno colabora» y, por tanto, Andorra «podría haber buscado alternativas a la intervención» del banco de la familia Cierco antes de que se hiciera pública la denuncia estadounidense.