Los españoles se resisten a vender el piso para evitar la ruina
Dos tercios de los que ofrecieron su casa en 2015 no la vendieron ni rebajando el precio un 14% y la mitad mantiene a capa y espada el precio inicial
Los españoles que quieren vender su vivienda siguen teniendo muchos problemas para hacerlo, debido a la resistencia numantina, por parte de muchos vendedores, a aplicar una rebaja considerable.
Se niegan en rotundo a reconocer minusvalías notables y, además, va en aumento los que se resisten a rebajar ni un euro. Un 52% de los propietarios que en 2015 no lograron cerrar la transacción reconoce que no está dispuesto a aplicar descuento alguno.
«Por primera vez desde que realizamos este estudio son más los propietarios que, pese a no vender, se resisten a bajar el precio de oferta, lo cual es muy sorprendente después de todo lo que ha ocurrido en el mercado inmobiliario», comenta Beatriz Toribio, responsable de Estudios del portal fotocasa.
Rebaja de 33.000 euros sobre 240.000
De la encuesta Experiencia de venta de vivienda de los españoles en 2015 también se desprende que la rebaja no es siempre garantía de venta. Un 66% de los propietarios que no vendieron no lo hicieron ni aplicando una rebaja media del 14% respecto al precio de salida. Unos 33.000 euros de media sobre una vivienda de 240.000 euros.
Otros, con ese mismo descuento, tuvieron más suerte y sí lograron cerrar la compraventa, el tercio de los propietarios que pusieron sus propiedades en el mercado, lo que viene a demostrar que «ubicación, distribución, calidades y características de la vivienda influyen cada vez más. Ya no todo se vende aunque esté en precio», explica Toribio.
En 2012 los descuentos fueron del 27%
La rebaja media del 14% aplicada en la venta es la menor registrada en los seis años que lleva haciéndose la encuesta, un periodo en el que el descuento ha oscilado entre el 15% y el 18%, salvo en 2012, en el periodo álgido de la crisis económica coincidente con el rescate de España por parte de la Comisión Europea para sanear el sistema financiero, cuando los descuentos alcanzaron el 27%.
Los propietarios que vendieron en 2015 tardaron una media inferior a los 11 meses, un mes menos que en 2014. El 44% vendió en menos de seis meses, 25% tardó entre 7 y 12, un 16% hasta dos años y el 15% restante lleva más de 24 meses con el piso en venta.
Casi la mitad vende su vivienda habitual
El 46% de los usuarios encuestados asegura que la vivienda puesta en venta en 2015 era la habitual, de cara a comprar otra, vivir en alquiler o por traslado obligado debido a razones laborales. Un 22% de la oferta vendida era segunda residencia –en su mayoría en áreas de la costa–, y otro 18% procedía de herencias.
Además de la rebaja en el precio, la encuesta también ha puesto de manifiesto el aumento a echar mano de un profesional para vender, como lo demuestra el hecho de que un 68% de las personas que vendieron recurrieron a una agencia inmobiliaria.
La mayoría argumenta que se decantaron por contratar a un profesional por la calidad de las visitas, la comodidad en delegar la gestión, la falta de visitas recibidas previamente y, también, para evita el engorro que supone la tramitación burocrática de la compraventa.