Los bancos sustituyen depósitos por fondos de inversión, ¿cuáles son sus riesgos?
Un producto bastante más complejo y con más riesgos que puede llevarnos, incluso, a perder dinero
Los depósitos bancarios vigentes en el mercado actual a duras penas alcanzan una rentabilidad del 3%.
Ante la falta de atractivo de estas ofertas, los bancos están ofreciendo como alternativa a sus clientes los fondos de inversión, un producto bastante más complejo y con más riesgos que, aunque se prometa más rentable, puede llevarnos incluso a perder dinero, según informa el portal de fianzas personales HelpMyCash.com.
En los últimos meses, varias han sido las entidades que han comenzado campañas anunciando en sus webs o escaparates de oficinas sus nuevos fondos de inversión. A pesar de que estos productos tienen sus ventajas (pueden dar más rentabilidad que un depósito, permiten diversificar la inversión, se gestionan por un inversor experto y contemplan ventajas fiscales), los inversores no expertos deben ir con pies de plomo antes de firmar la operación.
La propia Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha declarado recientemente su preocupación por un fenómeno que ha comparado con las mismísimas participaciones preferentes, en el sentido de que es probable que en las oficinas bancarias no se esté informando adecuadamente de sus riesgos. Por eso cabe recordar que los fondos de inversión no son depósitos y que tienen unos riesgos a tener en cuenta:
• No están garantizados por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD)
• El banco tampoco garantiza el capital invertido, por lo que puede haber pérdidas (a no ser que sea un fondo de inversión garantizado)
• Aunque los fondos de renta variable tienen una volatilidad mayor, esto no significa que los de renta fija sean del todo seguros. Es más, en estos momentos de tipos bajos se corre el riesgo de que, una vez vuelvan a subir los tipos, el valor de los bonos actuales caiga, lo que conllevaría pérdidas en el fondo
• Los fondos no tienen plazo, así que la inversión estará sometida a subidas y bajadas continuamente y cuando necesites el dinero tendrás que aceptar su valor de mercado
Estamos, por tanto, ante productos no garantizados y sometidos a los posibles altibajos de los mercados en un momento en que no se caracterizan precisamente por su estabilidad, por lo que cabe valorar en cada caso si correr el riesgo o ir a tiro seguro con uno de los mejores depósitos del mercado actual.