La crisis también arruina a la clase media de las empresas
Los salarios de los cuadros intermedios pierden un 7,83% desde 2007, mientras que los directivos han aumentado un 1,64% su capacidad adquisitiva
La transformación del mercado laboral es enorme. En los siete años de crisis económica, las empresas han adoptado un nuevo modelo, a trompicones, sin planes muy pensados, y aprovechando la reforma laboral para reducir costes, al margen de las necesidades futuras.
Pero el resultado es que los mandos intermedios, la clase media de las empresas, se han visto superados por la situación: son más prescindibles que hace unos años, y sus salarios menguan: en el periodo entre 2007 y 2014 sus sueldos subieron un 5,27%, pero con una inflación acumulada del 13,1%, perdieron un 7,83% de poder adquisitivo.
La reorganización interna de las empresas, ahora menos jerarquizadas, ha dejado sin un papel claro a cuadros intermedios que han visto como sus funciones pasaban a manos de otros responsables, tanto por encima de ellos, como por debajo.
Las empresas reducen costes, sin un modelo alternativo claro
Los directivos, en el mismo periodo, han experimentado un incremento de sus salarios del 14,75%, y, tras la inflación, han ganado un 1,64% de poder adquisitivo. En el caso de los empleados, la reducción de sus salarios ha sido del 2,03%. Ganaron un 11,07%, pero, tras la inflación, han sufrido esa pérdida de poder adquisitivo.
El análisis de esa transformación lo ha llevado a cabo ICSA Grupo y la escuela de negocios Eada, con el escrutinio de más de 80.000 datos salariales, a partir de tres grandes categorías: directivos, cuadros intermedios y empleados, y en las distintas comunidades autónomas.
Ernesto Poveda, director del estudio, y presidente del ICSA, asegura que esa caída de la clase media en las empresas responde a un proceso de «polarización», entre directivos y empleados, producto de un proceso «que no está siendo inteligente para nadie».
Es decir, la crisis ha llevado a las organizaciones empresariales a actuar «con el único objetivo de bajar costes, sin pensar en el futuro».
Los empleados pierden menos poder adquisitivo en 2014
Con ello, el salario medio bruto de los empleados en España se situó en 2014 en 21.757 euros; el de los mandos intermedios en 36.637 y el de los directivos en 78.840 euros.
En el caso de los empleados, los salarios han aumentado en el último año, lo que indica una cierta recuperación económica: un 2,11%. El descenso del IPC ha provocado que la pérdida del poder adquisitivo, desde 2007, sea del 2,03%, un porcentaje que, globalmente, «no es muy grande», según Poveda.
En 2014, en todo caso, los empleados mejoraron su situación, en relación a 2013, cuando la pérdida acumulada de sus salarios fue del 4,7%.
Comercio y turismo, los sectores con peores salarios
La relación salarial deja algunas certidumbres, que son constantes en el tiempo. La Banca y los seguros son los sectores con mejores salarios, y también la industria. En función de que se produzca una cierta reactivación industrial, la llamada ‘localización’ de empresas del sector, los salarios medios de los empleados subirán.
El sector servicios se encuentra en una posición intermedia, mientras que el comercio y el turismo, que han aguantado mejor la crisis, son los que pagan peor. El profesor de EADA, Jordi Costa, que ha colaborado en el estudio, considera que esa cuestión «es lógica, porque son sectores a los que muchos trabajadores acuden, porque no se necesita mucha formación». Sin embargo, eso supone un lastre para los dos sectores, según Poveda, que ha alertado, en la presentación del estudio, que «no se puede competir una y otra vez con costes laborales bajos y hay que ofrecer mayor valor añadido».
Italia, el país que mejor paga, en todos los sectores
El problema de las empresas españolas, según Poveda, es que deberían analizar sus situaciones de forma global, pensando a medio y largo plazo, y teniendo como meta ganar competitividad, y eso supone «no competir a nivel interno, o en los mercados europeos, sino en los mercados globales».
El estudio realiza una comparativa con dos países con una estructura similar a la de España: Francia e Italia. En el caso de los empleados, el salario medio en España es de 21.757 euros, por los 26.991 de Francia, y los 28.770 euros en Italia.
Respecto a los mandos intermedios, en España es de 36.637 euros, por los 42.786 euros de Francia, y los 54.233 de Italia. Y en el caso de los directivos, también en Italia están mejor pagados: 111.764 euros de media, por los 94.492 euros en Francia, y los 78.840 en España.