La banca aprieta con el crédito al consumo (pese al aviso del BdE)
Las entidades incrementan a doble dígito su volumen de crédito al consumo aunque aseguran que la morosidad está controlada
A pesar de que constituyen una pequeña línea en los balances de la banca, el Banco de España mira concierta preocupación el auge de los créditos al consumo en el país. Las entidades dispararon el volumen de estos préstamos a doble dígito a lo largo del último año, aunque aseguran que el salto no golpea los datos de morosidad. No obstante, el regulador nacional tiene una distinta opinión.
En la presentación de resultados de 2019 fueron varios los bancos que revelaron una fuerte escalada en este tipo de crédito. Desde Valencia, Gonzalo Gortázar, consejero delegado de Caixabank, hizo público un incremento del 13,8% del crédito al consumo. Fue la excepción en un contexto en el que los préstamos a particulares cayeron el 2,1% por una rebaja en la concesión de hipotecas.
Además, el ejecutivo también sacó pecho de que el ratio de morosidad de este tipo de créditos se había mantenido en el 4%. «Está claramente por debajo de la media del sector», señaló. Sin embargo, el tasa de impagos del banco cayó desde el 4,7% hasta el 3,6%, por lo que este tipo de productos ya se coloca en la parte alta de los impagos de clientes del banco.
Banc Sabadell elevó el crédito al consumo en un 11,9%
Pero Caixabank no es la única entidad que apostó por el crédito al consumo en 2019. Banc Sabadell elevó un 5% su volumen de estos préstamos a particulares. El dato real fue superior, aunque influye en su morosidad. Si la entidad no hubiera vendido colocado en mercado una parte de estos créditos, el alza hubiera sido del 11,9%, por encima del 11% que subió la concesión general de préstamos a clientes individuales.
Sin embargo, la entidad que preside Josep Oliu no hace pública la tasa de morosidad concreta para este producto.
Una tercera entidad que ayuda a vislumbrar la apuesta de la banca por el crédito a particulares es Bankia. El banco semipúblico anunció un crecimiento del 15,8% en la cartera, aunque supone solamente el 4,5% de los 120.000 millones de crédito bruto otorgado por la compañía que preside José Ignacio Goirigolzarri.
La organización anunció el año pasado una joint venture con Crédit Agricole con tal de empezar a trabajar con empresas –por ejemplo, concesionarios– y expandirse en el sector del crédito al consumo. «Estamos siendo extremadamente prudentes ya que no estamos financiando a nuestros clientes cuando realizan compras; lo estamos comercializando desde una muy prudente política de riesgos en consumo, ya que son preconcedidos», dijo el ejecutivo.
Bankinter aumentó su exposición al consumo con la compra de Avantcard, especializada en tarjetas
Gracias a esta política, fuentes de la entidad aseguran que la tasa de morosidad es sensiblemente inferior a la media. Y sostienen que la expansión en el segmento no ha incrementado los impagos: «no hemos notado el más mínimo repunte en la litigiosidad de nuestro consumo».
No obstante, el mayor crecimiento en el crédito al consumo lo protagonizó Bankinter, que en mayo de 2019 adquirió Avantcard, la filial de consumo de Evo Banco en Irlanda. Si las cifras de los otros bancos se centralizan en España, las de la entidad que dirige María Dolores Dancausa tienen una fuerte influencia de la Isla Esmeralda.
La compañía disparó el volumen de los préstamos al consumo en un 45%, lo que también elevó el ratio de morosidad hasta el 5,7%.
El Banco de España, atento
La escalada del crédito al consumo tiene al Banco de España en alerta, pues acostumbra a ser un indicador que puede anticipar una desaceleración económica en el país. Según el último informe de estabilidad financiera, los créditos al consumo crecía al ritmo del 12% hasta junio con un incremento del 26% de la morosidad.
La misma entidad muestra como el volumen actual de créditos dudosos de ser devueltos solo fue superado entre 2008 y 2014, aunque desde una entidad apuntan que llega impulsada por la financiación desde puntos de venta -concesionarios o tiendas- y no a través de los créditos preconcedidos tradicionales.
Como ya explicó Economía Digital, durante el pasado mes de noviembre se batió el récord de crédito al consumo de todo 2019. Coincidiendo con el popular Black Friday, entidades como Banco Santander y Bankia lanzaron ofertas específicas para realizar compras durante la jornada de descuentos del 29 de noviembre. Se hizo, eso sí, con la financiación más barata de todo el año.
Pero el Banco de España se le ha puesto entre ceja y ceja que las entidades deben ser prudentes con esta modalidad de crédito. Su gobernador, Pablo Hernández de Cos, ha mostrado en alguna ocasión su visión poco favorable a la modalidad de créditos al cero por ciento, ya que suelen llevar asociadas comisiones que compensan la falta de interés pero que contribuyen a la mala imagen de la banca.
Ya en verano advirtió: «El Banco de España seguirá de cerca estos desarrollos que, por el momento, no ponen en riesgo la estabilidad del sistema financiero español ni reclaman la adopción de medidas prudenciales, aunque sí requieren un incremento de la vigilancia en las condiciones de concesión de crédito».