Galicia lidera junto al País Vasco el rechazo al ERE del Popular-Pastor
La representación sindical en contra es tres veces superior a la del conjunto del Estado debido a la negativa de la CIG a firmar el acuerdo
La ruta singular que trazó el Popular en su implantación en Galicia, con la integración de Banco Pastor en 2012, ha topado con una respuesta también singular a la aplicación del ERE, que fue rubricado con el apoyo del 86% de los trabajadores de la entidad en España. Sin embargo, la contestación es mayor en territorio gallego, donde el ajuste se aplicará con más del 40% de la representación sindical en contra debido a la negativa de la CIG a firmar el acuerdo.
El sindicato, que aunó sus secciones en el Popular y en el Pastor en una sola, es mayoritario en Galicia, aunque no alcanza la mayoría absoluta en los seis comités de empresa que tiene el banco, cuatro de la entidad absorbida, el Pastor, y dos de la matriz, el Popular. Solo en el País Vasco, con la negativa de los sindicatos ELA y LAB, se detecta un rechazo equivalente, frente a la aceptación de CC.OO., el mayoritario en España, y UGT.
Además de los dos principales sindicatos españoles, también firmaron el acuerdo para el ERE otras dos centrales con representación en Galicia, Segrupo y FITC, mientras que se opuso CGT.
Impugnación
El mayor rechazo tiene importancia por el impacto del ajuste en suelo gallego, donde la salida de trabajadores rondará los 400, con el cierre de unas 40 oficinas, según estimaciones sindicales. También se espera una reducción de horarios de apertura para unas 25 sucursales ubicadas en zonas rurales. A esto hay que sumar que el Popular traspasó el pasado verano a Indra por un periodo de diez años el negocio de gestión hipotecaria, un equipo de 94 trabajadores que operan desde A Coruña. La externalización se produjo poco antes de que la entidad plantease el ERE.
El rechazo también es significativo por la posibilidad de que la CIG impugne el ERE, una opción que comenzará a estudiar. La representante sindical, Rosa Conde, asegura que la reestructuración no es necesaria, pues «hay escasez de personal en la red de oficinas», con trabajadores que deben «prolongar su jornada» para hacer frente a una carga de trabajo «excesiva». Atribuye a una mala organización del personal los desequilibrios que detecta el banco.
Los números del Pastor
El sindicato entiende que los números de Banco Pastor tampoco respaldan la aplicación del ERE. Como avanzó Economía Digital, la marca con la que opera el Popular en Galicia cerró su último ejercicio con unos beneficios de 40 millones –casi el doble que en 2014–, con una mejora en el margen de intereses y en el margen bruto.
Sin embargo, el tamaño del negocio se redujo. El volumen de activos cayó un 5,7%, hasta los 11.581 millones, incluyendo un descenso de los recursos de clientes en balance, que sumaban 8.792 millones tras una disminución del 5,5%. El crédito a clientes alcanzaba a cierre de ejercicio los 5.148 millones, un descenso del 4%.
Plazo para acogerse al ERE
El plazo para la impugnación es de 20 días a partir de la fecha en la que el acuerdo se presente a las autoridades laborales.