Galicia afronta los ERE de BBVA y CaixaBank tras recortar a la mitad su red bancaria en una década
Los ERE de Santander, BBVA y CaixaBank recortarán otros casi 600 empleos en un sector bancario que ha reducido su plantilla en Galicia de 6.384 a 3.551 trabajadores desde 2009
Galicia encara una nueva oleada de expedientes de regulación de empleo (ERE) en los bancos con las plantillas del sector bajo mínimos. El estallido de la crisis financiera del 2008 y el avance de la digitalización ha precipitado un doble recorte (en empleo y tamaño de la red de sucursales) que ha provocado que el sector haya perdido a prácticamente la mitad de su masa laboral en la comunidad en una década.
Así lo certifican los datos de la Asociación Española de Banca (AEB). Según su último anuario (con datos al término de 2019), las entidades financieras cerraron con 3.551 trabajadores en plantilla el año previo a la crisis del coronavirus. Se trata de un 44,2% menos que los 6.384 que se registraban en el año 2009, cerrando así una década de fuertes recortes que ahora el sector retoma en este 2021.
El descenso en el número de trabajadores ha sido prácticamente registrado en el tamaño de su red comercial. Y es que las estadísticas del Banco de España revelan que las entidades han pasado de contar con 2.395 sucursales en el año 2009 a 1.226 en 2019, lo que representa una caída del 43,4%.
A Coruña, provincia más afectada
El tijeretazo de las entidades financieras hace notar especialmente en la provincia más bancarizada. Se trata de A Coruña, que aglutina prácticamente la mitad del empleo total del sector en Galicia (cuenta con 1.654 trabajadores sobre un total de 3.551 en toda Galicia), pero que ha visto cómo el número de trabajadores se ha visto recortado hasta la mitad (un 50,2% menos) desde el año 2009. Por aquel entonces la provincia, que contaba con el efecto sede de Caixa Galicia o Banco Pastor, contaba con 3.319 trabajadores, casi tantos como los que 3.551 que registra ahora toda la comunidad.
A la provincia de A Coruña le sigue la de Pontevedra, en donde se han destruido el 40,4% de los empleos en el sector financiero. Estos han descendido desde 1.894 hasta 1.129, una cifra que supera a la suma de Ourense (363) y Lugo (405), territorios en los que la caída de empleo ha sido ligeramente inferior: del 37,5% y el 31,4% respectivamente.
Casi 600 despidos más a la vista
Tras este tijeretazo a las redes comerciales y a sus plantillas, la comunidad se prepara para encajar otro ajuste de la mano de Banco Santander, BBVA y CaixaBank-Bankia. El propio José Antonio Álvarez, consejero delegado de la primera, anunció el mes pasado que, según las previsiones del banco, entre los meses de abril y mayo se cerraría la salida de 3.500 empleados en toda España, de los cuales 370 trabajan en Galicia, comunidad en la que, además, se clausurarán 80 sucursales.
Santander abrió la veda a finales del año pasado y, a la espera de cerrar definitivamente su ERE, tanto BBVA como CaixaBank-Bankia han apostado por medidas similares. La firma capitaneada por Carlos Torres prescindirá de 3.798 personas en toda España (cifra ligeramente superior a la del Banco Santander), pero el impacto de su ERE en Galicia será inferior al de la entidad presidida por Ana Botín. El proceso se saldará con un total de 111 salidas en Galicia (66 en A Coruña, 26 en Pontevedra, 10 en Ourense y nueve en Lugo) y con el cierre de 59 sucursales entre la comunidad gallega, la asturiana y la castellanoleonesa.
A estos ERE se suma el planteado la semana por CaixaBank tras la integración de Bankia. La firma ha propuesto el mayor despido colectivo de la historia del sector en España al proyectar la salida de 8.291 trabajadores, de los cuales un total de 90 se corresponden a Galicia, comunidad en la que la firma cuenta con cerca de 800 empleados.