El Santander arrebata 25 millones en sueldos a la antigua cúpula del Popular
El banco demanda a Ángel Ron y al ex consejero delegado, Francisco Gómez, para que devuelvan parte de lo que cobraron
El Santander se ha puesto manos a la obra para quitar la retribución variable que debe abonar a la antigua cúpula del Popular por su gestión al frente del banco. La negativa de Ana Botín a pagarr 25 millones en bonus y pensiones afecta tanto el equipo de Ángel Ron, como a la corta etapa de Emilio Saracho al frente de la entidad hasta su resolución.
No solo rechaza los pagos a los que tendrían derecho los directivos. También ha presentado una demanda contra Ron y el ex consejero delegado Francisco Gómez para exigirles la devolución de parte de lo cobrado. La demanda civil también se dirige contra Mapfre, la aseguradora que abona la prejubilación al expresidente de Popular.
Los 25 millones que pretende ahorrarse Botín irían a parar a los bolsillos de Ron, Saracho, Gómez y otros dos ex consejeros delegados, Pedro Larena e Ignacio Sánchez-Asiaín. Según avanzó El País, solo a Ron y a Gómez se les exige la devolución de cantidades ya percibidas.
Aferrado a la normativa europea
El banco cántabro se acoge, entre otras, a la cláusula de recuperación o clawback contemplada en la política de remuneraciones de Popular aprobada en 2015. Esta disposición establece que el banco puede exigir a los beneficiarios la devolución de la retribución variable anual durante los tres años siguientes a la liquidación, si queda acreditado que fue percibida con arreglo a información falsa o inexacta.
También será exigible esta remuneración variable si afloran riesgos asumidos durante el periodo u otras circunstancias no previstas que tengan un efecto negativo material sobre las cuentas de resultados.
Popular incorporó estas cláusulas a su sistema de retribuciones en el marco de la adaptación de Basilea III al ordenamiento jurídico de la Unión Europea (UE) antes de que fuesen de obligado cumplimiento.