El primer tijeretazo de Botín amenaza a 200 trabajadores del Popular en Galicia

El primer tijeretazo del Santander derivado de la absorción de Banco Popular pondrá en riesgo 194 puestos de trabajo en Galicia. El ajuste por la integración de los servicios centrales afecta a los centros de apoyo que el banco tiene en A Coruña y en Bergondo. Ambas oficinas entran en el proceso de negociación de un expediente de regulación de empleo.

En la capital herculina, en sus oficinas de la calle Orillamar, funcionan cuatro departamentos diferenciados: uno de apoyo administrativo, con 36 trabajadores; un centro de posfirma hipotecaria, con otras 39 personas; uno de desarrollo tecnológico, con 29; y un último de gestión de operaciones de activo, con 53. En total, 157 empleados, según informan fuentes sindicales, que acudieron este viernes a la reunión con la dirección del Santander.

En Bergondo desarrollan labores de banca directa otras 37 personas (de ahí el total de 194 empleados) que antes se enmarcaban en la oficina virtual de Pastor. El ajuste por la integración de los servicios centrales afectará al personal de ambos bancos, del Santander y del Popular. 

Prejubilaciones y salidas voluntarias

Se trata de un primer recorte, pues el ajuste en la red de sucursales no se realizará hasta que finalice la integración tecnológica, según las previsiones del banco, en 2019. Rosa Conde, portavoz de la CIG, ha destacado que las «líneas rojas» de la central nacionalista pasan por que «no es necesario hablar de despidos», al tiempo que advierte de que la «voluntariedad» en estos procesos se limita «al papel».

Por su parte, el representante de UGT en Pastor, Javier Castro, subraya que «sobre la mesa tienen que estar prejubilaciones y salidas voluntarias». El banco ya ha convocado a otras dos nuevas reuniones a los sindicatos, el próximo miércoles 8 y el lunes 13. Los dos sindicatos se quejaron de la escasa información que aportó el banco respecto al ERE.