Economía sanciona a PwC por las cuentas del Popular

El Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas, organismo autónomo adscrito al Ministerio de Economía, ha sancionado a PwC por dos infracciones graves en la fiscalización de los números del Popular. El ICAC considera que cometió un incumplimiento en la revisión de las cuentas del ejercicio 2012 y, por consiguiente, también en el informe de auditoría que emitió el 28 de febrero de 2013 con la valoración de dichos resultados. La auditora reduce dicho incumplimiento a un «defecto formal en una partida puntual cuyo contenido no se puso en duda».

El organismo ha acordado imponer a PwC dos sanciones, las más bajas que contempla la ley, por importe del 0,12% y del 0,15% de los honorarios facturados por actividad de auditoría de cuentas en el último ejercicio cerrado con anterioridad a la imposición de las multas. Ascenderían a 119.908 euros y 149.885 euros, aunque la auditora ha recurrido la resolución.

A estas sanciones se suman las impuestas a José María Sanz Olmeda, socio auditor y firmante del informe de auditoría, por importe de 3.200 euros y 3.400 euros. Los resultados de Banco Popular, entidad que acabó en situación de insolvencia y vendida al Santander por un euro, cerró aquel ejercicio con 2.460 millones en pérdidas, que justificaron la primera ampliación de capital de Ángel Ron para sanear el balance.

PwC fue el auditor del Popular durante 20 años. La firma manifestó su desacuerdo con la resolución del ICAC y recordó que el propio organismo revisó de manera «exhaustiva» la auditoría de 2012 «durante doce meses», sin cuestionar la opinión de auditoría ni la veracidad de los números del banco. «El único aspecto sobre el que llamó la atención se refiere a un supuesto defecto formal en los papeles de trabajo de una partida puntual», señalan desde PwC. «Creemos que el ICAC fundamenta la sanción con argumentos muy subjetivos y sin ningún respaldo en la normativa y en la práctica auditora», concluyen.