Blablacar pone en evidencia las carencias del transporte público gallego
Los usuarios recurren al coche compartido para sus desplazamientos diarios entre ciudades próximas ante la falta conexiones públicas eficientes
La economía colaborativa hace patentes las carencias del transporte público en Galicia. La falta de conexiones eficientes entre localidades próximas lleva a que cada vez más usuarios opten por el coche compartido como opción más económica o en algunos casos la única viable para desplazarse en su día a día. Los datos de la plataforma de coche compartido más utilizada, Blablacar, avalan esta realidad en Galicia a diferencia de lo que ocurren en el conjunto de España. Unos 125.000 gallegos están registrados en esta red de carsharing y la usan sobre todo para moverse entre ciudades cercanas.
«En el primer cuatrimestre de 2016 han destacado por su frecuencia los trayectos entre ciudades gallegas», aseguran desde la organización. «Aunque la media de distancia recorrida en los viajes realizados con BlaBlaCar es de 300 kilómetros, en Galicia gran parte de los desplazamientos se realizan dentro de la comunidad», constatan. Ourense, pese a ser la menos poblada, es la provincia con más usuarios y el recorrido más frecuente desde Ourense ciudad es a Vigo, con un 28%. Desde Vigo, en cambio, la mayoría de los viajes son a Santiago (un 12% de los que tiene este origen). Desde Lugo, los usuarios se desplazan en coche compartido fundamentalmente a A Coruña (20%) y desde A Coruña la mayoría de los trayectos son a Ferrol (más del 12%).
Un éxito que esconde un fracaso colectivo
Los trayectos con más éxito de la plataforma Blablacar se nutren de carencias de del autobús interurbano y el tren de cercanías. «Si hubiera un transporte público con tiempos y precios razonables ni yo ni los que vienen conmigo cogeríamos el coche», asegura Pablo Fernández, que se desplaza a diario entre Ourense y Vigo. Este conductor lleva dos años poniendo su vehículo a su disposición de otros usuarios y desde su experiencia observa que esta alternativa va a más para poder economizar.
En cuanto al perfil, Pablo Fernández comenta que entre Vigo y Ourense abunda el público universitario, tanto de estudiantes como de profesores. Cada ocupante abona unos cinco euros por trayecto, lo que según calcula le supone un ahorro de 200 a 300 euros al mes según la ocupación, que «si no cubre, ayuda a compensar el gasto de combustible», explica. El tren entre Vigo y Ourense cuesta entre 12 y 22 euros y tarda entre hora y media y dos horas y veinticinco minutos.
«En transporte público no podría permitirme ir y volver todos los días»
Otro trayecto en las que el transporte interurbano no da la talla es el que une A Coruña y Ferrol, un tramo que como en el caso de Ourense-Vigo o Lugo-Santiago también conecta campus universitarios. Fátima Díaz trabaja con una beca en la Universidade de A Coruña y lleva desde febrero trasladándose diariamente entre Ferrol y A Coruña. «Con el transporte público probablemente no podría permitirme ir y venir todos los días», asegura. Ir en tren le supondría el doble de tiempo y más dinero que la opción del coche compartido. «Pago entre tres y cuatro euros y siempre hay plazas porque entre las siete y las ocho todos los días hay bastantes coches disponibles», explica. «Antes iba desde Santiago a A Coruña y muchas veces usaba el tren porque la conexión es buena, pero el tren entre Ferrol y A Coruña tarda muchísimo y el autobús es caro», señala.
El servicio de Renfe entre A Coruña y Ferrol tarda entre una hora y cinco y una hora y veinte minutos. Los precios oscilan entre los 4,60 euros de la opción más lenta, la turista con enlace, y los 15,20 del Alvia. El mismo trayecto en autobús lleva entre 50 minutos y una hora y tres cuartos con la compañía Arriva, la única que presta el servicio. El precio ronda los ocho euros.
Ourense, la provincia con más usuarios
A pesar de ser la provincia menos poblada de Galicia, Ourense es la que registra más usuarios de Blablacar. Alejados del eje Atlántico que ofrece las mejores conexiones de transporte en Galicia, sus habitantes buscan alternativas ante las carencias de transporte. Un total 42.744 ourensanos están registrados en Blablacar, frente a 40.589 residentes en la provincia de A Coruña, 24.425 de Lugo y 17.242 de Pontevedra.
Jaime Rodríguez de Santiago, responsable de Blablacar en España cree que éxito de los viajes compartidos de corta distancia en Galicia «se debe a que muchos de los trayectos realizados unen puntos de la comunidad que sólo pueden realizarse de forma directa en coche; muestra de ello es que los 10 trayectos más habituales concertados a través de BlaBlaCar, sólo suponen un 3% de los viajes que se publican en la plataforma y es habitual, en Galicia, encontrar viajes entre Lalín y Madrid, Chantada y Pontevedra o A Coruña y Cáceres». Por otro lado, en los trayectos cercanos y frecuentes, según comentan los usuarios, los conductores y los ocupantes se fidelizan y muchas veces quedan para compartir trayectos de forma directa, sin pasar por la plataforma, con lo que los viajes cortos compartidos serían más de los que figuran en las estadísticas.
Por comunidades, Galicia es la séptima que más utiliza la plataforma de carsharing, por detrás de Andalucía, Madrid, Comunidad Valenciana, Castilla y León, Cataluña y Extremadura, con 125.000 usuarios. La economía colaborativa emerge como nuevo estilo de vida y forma de compartir gastos entre usuarios, pero también como respuesta a un servicio público al que gran parte de los usuarios le piden mejoras en eficiencia y precios para adaptarse a sus necesidades.