¿Bajar impuestos sin recortar gasto público?
Los expertos advierten de que la reforma es injusta y pone en peligro conseguir los objetivos fiscales que marca Bruselas
El IRPF es la columna vertebral del sistema fiscal español. Recauda algo más de 70.000 millones de euros. Esa fue la cifra en 2012, y eso representa el 43% de la recaudación de la Agencia Tributaria.
La bajada que ha propuesto el Gobierno supone un 12,5% menos, aunque la quiere acometer en dos años, en 2015 y 2016. Supondrá unos 9.000 millones menos, que los expertos ven excesivo, si no va acompañada esa rebaja de un recorte en el gasto público.
Objetivos de déficit
El inspector de Hacienda, Francisco de la Torre, se muestra muy cauto. “Habrá que ver la letra pequeña y las posibles compensaciones de esa rebaja, pero en estos momentos, con lo que el Gobierno ha anunciado surgen serias dudas sobre cómo se podrán alcanzar los objetivos de déficit, para pasar del 5,8% al 2,8%”, asegura.
De la Torre, autor del libro ¿Hacienda somos todos?, es muy crítico con el sistema fiscal español, que ve “deslabazado”, sin constituir un cuerpo doctrinal coherente.
El problema de ese sistema fiscal es que está demasiado fundamentado en las rentas del trabajo, por lo que un descenso en la recaudación en el IRPF puede poner en tela de juicio todo el organigrama. De la Torre presentó un estudio en 2011 que desveló que “en la práctica, con los últimos datos disponibles, el 85% de la recaudación del IRPF provenía de las rentas del trabajo”.
Clases medias
De la Torre cree que el Gobierno ha considerado que con la prima de riesgo ahora tan baja, la financiación de la deuda está garantizada y que puede acometer rebajas fiscales que beneficien, fundamentalmente, “a las clases medias”, y que, por tanto, dejen al PP en una buena posición de cara a las elecciones generales.
Pero “nadie garantiza que los mercados nos sean propicios para siempre”, asegura, para añadir que el Gobierno espera que el crecimiento económico compense esa caída en los ingresos y que los españoles, con algo más de dinero en el bolsillo, contribuyan a la reactivación. “Pero podrían utilizar ese dinero para ahorrar”, añade.
Este inspector de Hacienda recuerda que la rebaja de 400 euros del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero alcanzó los 4.500 millones, es decir, menos que la rebaja que pretende ahora aplicar el Gobierno del PP.
Las rentas más altas, las más beneficiadas
El colectivo de técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) también duda de la reforma fiscal. Considera que “los 73.000 contribuyentes con ingresos de más de 150.000 euros anuales serán los más beneficiados”, y que las clases medias “amortiguarán una vez más la rebaja fiscal de las grandes fortunas”.
Y lo que es peor, porque el propio ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro se había comprometido a ello: “No podemos hablar de una reforma integral del sistema fiscal, sino sólo parcial”, según el secretario general de Gestha, José María Mollinedo.
Respecto a la rebaja en el impuesto de sociedades, Gestha entiende que no será efectiva. La rebaja del 30% al 25% del tipo nominal “sólo beneficiará a las grandes empresas, que a día de hoy ya no tributan ni delejos por esa cuantía.
De hecho, el tipo medio efectivo de las grandes corporaciones se sitúa en el 3,5%, ocasionando una pérdida recaudatoria de 26.000 millones de euros anuales”.