Ángel Ron rompe su silencio: «Saracho iba a montar una tómbola»
El expresidente del Banco Popular asegura que su sucesor, Emilio Saracho, creía que la acción "estaba cara" y le dijo que "montaría una tómbola"
Ángel Ron rompe su silencio cuando ha pasado más de un año de la quiebra y resolución del Popular. El que fue presidente del banco entre los años 2006 y 2017 ha asegurado este jueves en el Congreso que su sucesor, Emilio Saracho, le dijo que la acción del Banco Popular «estaba cara» y que, si no podía vender la entidad o ampliar el capital rápidamente, «montaría una tómbola».
Durante su comparecencia ante la comisión que investiga en la Cámara Baja la crisis financiera, el rescate bancario y la quiebra de las cajas de ahorro, y que dedica una fase específica a investigar la caída del Popular, Ron ha acusado a su sucesor de buscar una depreciación de la acción de la entidad. Así, ha dicho que el propio Saracho llegó a decirle que buscaba «arreglar» la situación del Popular «con una ampliación de capital a bajo precio, o una transacción a bajo precio» y «que, si no lo hacía rápido, montaría una tómbola». «Me pareció especialmente desagradable», ha apostillado.
Pilotar un caza
Así, ha comentado que Saracho consideraba que «para hacer esa operación la acción estaba cara» y que «el principio básico como banquero de inversión era infundir pánico y asustar a autoridades, accionistas y al mercado».
Por otro lado, ha asegurado que Saracho reconoció «no conocer los fundamentos de la banca comercial» no sólo ante él, sino ante más consejeros y directivos de la entidad, y «que no sabía ni venía a gestionar, que para eso estaban los anteriores».
En este sentido, ha comparado la gestión de Saracho con la conducción de un avión comercial «como si fuera un caza». «Llega al aeropuerto pero los tripulantes y los pasajeros se mueren. Porque, obviamente, si se empiezan a hacer ‘loops’ y triples, y descensos en picado, al final lo que ocurre es que se perdió la confianza», ha dicho.
Un atropello
El expresidente del banco ha asegurado que ha sido «penoso» que los accionistas de la entidad perdieran todo y pide a la Justicia que encuentre una explicación a este «atropello tan flagrante». «Es penoso que los accionistas hayan perdido todo sin transparencia, sin justiprecio y sin información. Espero que la Justicia encuentre una reparación y una explicación a este atropello tan flagrante», ha subrayado Ron.
Para el expresidente de la entidad resuelta y posteriormente comprada al simbólico precio de un euro por Banco Santander, resulta «imprescindible» saber qué ocurrió realmente con el banco y por qué desaparecieron los ahorros de 300.000 familias.
«No había visto jamás una situación en la que, de la noche a la mañana a los accionistas de un banco cotizado y sometido a supervisión, y que nunca había incumplido ni una sola vez los requerimientos legales, se les desposeyera de su propiedad», ha aseverado.