Abanca sacrifica la mitad de sus ganancias para protegerse del Covid
El banco de Juan Carlos Escotet gana 133 millones en el primer semestre de 2020 tras destinar 163 millones a reforzar las provisiones contra la pandemia
Abanca ha cerrado el primer semestre del año con 133 millones de beneficios, apenas seis millones más que las ganancias logradas en el primer trimestre del año y un 43% menos que las obtenidas en el mismo periodo del ejercicio anterior, cuando alcanzó los 250 millones de beneficio. La dotación de provisiones para hacer frente al Covid-19 ha sido clave en el parón, pues la entidad de Juan Carlos Escotet ha seguido la misma pauta que la mayoría de bancos, sacrificando beneficios para reforzar su colchón de seguridad ante la pandemia.
Abanca ha destinado 162,8 millones a provisiones ante el “previsible deterioro económico” que provocará el coronavirus, situando su coste riesgo en el 0,68%. Estas provisiones incluyen 57 millones destinados a cubrir el potencial deterioro de la cartera de crédito. El banco recalca que su tasa de morosidad está en el 2,7%, por lo que se erige en una de las entidades “más sólidas del sector financiero español” por la calidad de los activos y los elevados niveles de capitalización, con un exceso de 1.100 millones sobre los requisitos. El saldo de dudosos cayó casi un 7% en un año.
El volumen de negocio crece un 13%
El volumen de negocio continúo en senda ascendente durante el semestre, elevándose un 12,8% hasta alcanzar los 88.693 millones. El crédito a clientes aumentó un 15,6% y la captación de recursos, los depósitos, se situaron en los 49.662 millones, un 11,6% más. El banco asegura que ganó cuota de mercado, registrando un crecimiento interanual de 17 puntos básicos en fondos de inversión, de 11 puntos en planes de pensiones y de 13 puntos en seguros de vida.
El margen de intereses creció en un 11,2% respecto al primer semestre de 2019, mientras que el margen bruto lo hizo en un 27,4%. Abanca asegura que antes de provisiones el crecimiento se situaba en el 56,1%.
