Xeal multiplicó por siete su beneficio antes de apagar hornos en la fábrica y proyectar una nueva central

La dueña del antiguo complejo de Ferroatlántica en Cee y Dumbría ganó casi siete millones de euros entre las críticas de los sindicatos por el recorte de producción y la "segregación encubierta" de su negocio energético

Xeal

Imagen de la protesta de trabajadores de Xeal frente a la sede de la Xunta de Galicia en Santiago de Compostela / Europa Press

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Lluvia de beneficios para Xallas Electricidad y Aleaciones (Xeal) tras el golpe del Covid-19. La sociedad a través de la cual Ithaka Partners y el fondo Sixth Street Partners articulan su inversión en el antiguo complejo de Ferroatlántica en Cee-Dumbría y sus diez minicentrales hidroeléctricas multiplicó sus ganancias por siete en el año 2021.

Según se desprende de las últimas cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil de Madrid, Xeal se anotó un beneficio neto de 6,6 millones de euros. La cifra contrasta con los 922.000 euros que se había embolsado en un 2020 marcado por el estallido de la pandemia, que forzó a la compañía a recurrir a un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).

Xeal duplicó ventas

Xeal disparó sus beneficios tras duplicar su cifra de negocios. Y es que su facturación pasó de los 68 millones de euros alcanzados en 2020 a los 141 millones en 2021 debido, principalmente, al repunte de su negocio de electrometalurgia. Este pasó de aportar 48,6 millones de euros en ingresos en 2020 a 117,6 millones en 2021. «El precio de los metales y las ferroaleaciones aumentó significativamente en la segunda mitad de 2021 y principios de 2022», añade la firma, que vio incrementada la contribución de su negocio energético de 19,4 a 23,4 millones de euros.

Xeal se vio impulsada también por los 12,3 millones de euros que se anotó en subvenciones debido, principalmente, a la asignación de los derechos de emisión de gases efecto invernadero por parte del Ministerio para la Transición Ecológica. Estas entregas de 196.539 derechos para expulsar dióxido de carbono a la atmósfera (menos que los 281.862 recibidos el año anterior) tuvieron lugar a las puertas de un 2022 en el que la compañía vive dos caras.

De las centrales hidráulicas al complejo de Cee-Dumbría

Su división de electrometalurgia se ha visto golpeada por los elevados precios de la energía. Según el comité de empresa, solamente hay un horno en marcha en cada una de las fábricas (Cee y Dumbría). Es por ello que los sindicatos han advertido esta semana del «recorte» tanto en producción como en personal (su plantilla descendió de 272 a 268 personas a lo largo del ejercicio 2021), así como de un «intento de segregación encubierto» de actividades.

Según el comité de empresa, el interés de Xeal se encontraría más en sus diez minicentrales hidráulicas de 167,6 megavatios de potencia combinada que en el complejo industrial. En este sentido, los sindicatos censuran que la firma intente «aumentar la producción eléctrica a través de dos nuevas explotaciones hidroeléctricas», «una ya solicitada para el aprovechamiento del caudal ecológicos del embalse de Santa Uxía«.

Se trata del proyecto de construcción de una central hidroeléctrica reversible que la compañía ha activado en este 2022. El plan de Xeal contemplaría una inversión cercana a los 350 millones de euros para poner en marcha esta instalación mediante la cual se conectan dos depósitos de agua (uno superior e inferior), lo que le confiere una doble capacidad. Por un lado, puede generar energía eléctrica a través de los saltos de agua, pero, además, el agua puede hacer también el camino a la inversa y subir al depósito superior para estar así disponible para convertirse en energía eléctrica en momentos de repunte de la demanda o escasez de la oferta.

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