«Wall Street decide el precio del café que tomas en el desayuno»
Andrea Illy, el presidente de la compañía cafetera, destaca la importancia del producto para la salud: "Ayuda a prevenir la diabetes y el alzhéimer"
Desde 2008, con la caída de Lehman Brothers, el mercado de la especulación se ha diversificado. De las hipotecas basura se ha pasado a todo tipo de productos entre los que destacan las materias primeras. El oro es la más conocida, pero no se libra su homónimo oscuro. El conocido como el oro negro: el café. «En Wall Street se decide el precio de las variedades Arábica y Robusta (las dos principales)», explica Andrea Illy, presidente de la compañía cafetera Illy.
En los últimos años el precio no ha parado de subir debido a la «escasez de materia prima», ilustra. «El aumento del coste de la mano de obra y del petróleo y el cambio climático han comprometido las cosechas en los últimos 5 o 6 años», lamenta. Lejos queda el inicio del milenio, cuando se tiraba a la basura y se llegaban a desplantar cultivos por la falta de rentabilidad. Una crisis que ahora se vive en el mercado de la leche español.
Pese a todo, el precio debería ser más alto
Sin embargo, Illy considera que el precio del grano debería ser más alto. «La fortaleza del dólar y la ralentización de la economía mundial, especialmente en China y Rusia frenan la especulación», explica. ¿Por qué debería crecer? «Por el déficit productivo existente y por El Niño, una ola de aire caliente que invade la costa de Sudamérica y está provocando sequías en varias plantaciones de café», cuenta, didáctico. Los especuladores parecen estar de acuerdo; en las últimas dos semanas ha aumentado un 10%.
La compañía lo sabe bien. Al carecer de plantaciones propias acude directamente a los agricultores para adquirir el producto. «Sólo trabajamos con Arabica pura, y la importamos de países como Kenia, Etiopía, Brasil o Colombia», cuentan desde la firma. «Pagamos un 20% más que lo que marca el mercado», presumen. Una manera de motivar a los cultivadores a mantener los estándares de calidad que exigen.
Ahora mismo, pero, la volatilidad es baja debido a la falta de liquidez en el mercado. La atención, además, se ha girado hacia otras materias primas.
De pura cafeína a toda una experiencia
Otra de las causas de este aumento es que el consumo del café «se ha convertido de pura cafeína a toda una experiencia», cuenta el directivo italiano. Al cambio ha contribuido la tecnología. Illy preside la Association for Science and Information on Coffe y sonríe cuando se asocia al producto con la imagen artesanal del personaje de Juan Valdez creado por los cafeteros colombianos.
«La tecnología ha sido vital», explica. «En primer lugar por el placer; se ha mejorado el tostado, el molido y la conservación del grano. En segundo por la salud; más de 25.000 estudios en los últimos 15 años demuestran que ayuda a prevenir el alzhéimer o la diabetes. En tercer punto la sostenibilidad; hemos logrado reducir las emisiones de CO2 de una manera más que notable», enfatiza.