Vuelco en otra multinacional de los geriátricos tras el Covid: el Estado francés toma el control de Orpea
La entidad pública CDC se hará con la mayoría accionarial de la compañía, que tiene residencias de mayores en A Coruña y Lugo y debe más de 9.000 millones
La multinacional Orpea, uno de los grandes grupos de residencias de mayores que opera en España, ha encontrado una solución a su problema de deuda, pero pasa por entregar el control de la compañía al Estado francés. La entidad financiera pública Caisse des Depots et Consignations (CDC) capitalizará deuda y se convertirá en el accionista de control de la compañía, que cuenta con 53 geriátricos en España, incluyendo una residencia en Culleredo (A Coruña) y un centro de día y residencia de mayores en Lugo. Con presencia en 22 países y unos 60.000 trabajadores, el grupo debe más de 9.000 millones, un abultado pasivo que acumuló durante su proceso de expansión y que amenaza, según Le Monde, el pago de las nóminas en el segundo semestre de este año.
El medio francés Liberation avanzó que CDC, liderando a un grupo de acreedores entre los que están la aseguradora CNP y las mutuas MACSF y MAIF, había logrado llegar a un acuerdo para convertirse en el accionista de control de Orpea, alcanzando hasta un 50,2% de la compañía. La toma de control permitiría limpiar 3.500 millones de deuda, ya que las entidades asumirían una rebaja del 70%, y ampliar capital por una cuantía entre 1.300 y 1.500 millones, de los que CDC asumiría la mayor parte. Este plan está pendiente de la aprobación de la financiera pública, que podría producirse este mismo miércoles. Debido a la relevancia de la operación, necesita reunir a su consejo de administración para que den el visto bueno.
Orpea pidió este lunes la suspensión de sus acciones en bolsa tras reanudar la negociación con sus acreedores. El nuevo consejero delegado, Laurent Guillot, presentó el 15 de noviembre de 2022 un plan de reducción y refinanciación de la deuda para reflotar el grupo, pero las negociaciones se rompieron hace unas semanas. La multinacional sufrió un severo castigo en bolsa, con una depreciación del 93% en 2022.
Daño reputacional
La losa de la deuda, que aún después del enjuague que propone el pool de acreedores liderado por CDC, seguirá siendo pesada. Al igual que el golpe reputacional que sufrió la compañía a raíz de la publicación de un libro de investigación, Les Fossoyeurs, que denunciaba malas prácticas y abusos a los usuarios de las residencias, además de desvío de fondos por parte de dirigentes de la empresa. La publicación se sumó a los episodios acaecidos durante la pandemia por Covid-19, que puso el foco en los geriátricos privados por el elevado número de contagios y fallecimientos de ancianos.
El relevo en la cúpula y, previsiblemente, en la propiedad de Orpea debido a su crisis de deuda será el segundo en las multinacionales de la tercera edad que operan en Galicia. Previamente, DomusVi cambió de puesto a su histórica consejera delegada, Josefina Fernández, anterior responsable de Geriatros, y nombró a José María Pena como primer ejecutivo.