Vigo, Pontevedra y Vilagarcía cierran su fusión y abren el nuevo mapa de las Cámaras gallegas
El próximo lunes se constituirá el primer órgano de Gobierno de la nueva entidad un año después de que se aprobara la integración; A Coruña ofrecerá servicios para toda la zona norte
El fin de las cuotas obligatorias abonadas a las cámaras de comercio y el impacto de la recesión económica en las empresas forzó el proceso de concentración de entidades que está viviendo Galicia, ya sea a través de la prestación de servicios, como realiza la Cámara de Comercio de A Coruña a sociedades de la demarcación de la Cámara de Lugo, o mediante fusiones, como la que aprobaron en marzo de 2015 los plenos de las cámaras de Vigo, Pontevedra y Vilagarcía.
La integración de los tres organismos fue autorizada por la Xunta el pasado diciembre y tras un breve bloqueo que obligó a aplazar el primer pleno de constitución por reclamaciones que afectaban a las vocalías del nuevo organismo, el próximo lunes se constituirá en Vigo su primer órgano de gobierno. Comenzará a andar así la que fue la primera fusión en España de estas corporaciones de derecho público en 30 años.
De Silveira Cañizares a Abanca
En la sesión constituyente estarán representantes de las cámaras extintas que constituyen el pleno de donde saldrá el comité ejecutivo y el presidente. La Xunta estableció los porcentajes de representación que correspondían a cada demarcación. Cualquiera de los allí presentes puede postularse durante la sesión y lo cierto es que están representadas algunas de las mayores empresas de la provincia.
Forman parte del pleno el director de la fábrica de Ence en Pontevedra, Antonio Casal; el director de El Corte Inglés de Vigo, Ignacio Granado; el director de Banca Institucional de Abanca, Santiago Nóvoa; el director general del astillero Cardama, Mario Cardama; Roberto Rodríguez Díaz, de Pescanova; Luis Güell, de Cementos Cosmos; María José Táboas, de Citröen; y hasta el propio José Silveira Cañizares, el dueño de Povisa y de la naviera Elcano.
[Puede consultar aquí la lista completa de miembros del pleno]
A Coruña se adueña de la zona norte
El pistoletazo de salida para el nuevo gobierno de la Cámara de Pontevedra, Vigo y Vilagarcía de Arousa –el nombre oficial, por este orden– también marcará el simbólico inicio de la reestructuración de las entidades en Galicia. La Cámara de A Coruña abarcará, a priori, la zona norte de la comunidad, después de que la cámara lucense solicitase la prestación de servicios para empresas de su demarcación.
El mismo encargo tiene para los empresarios de Ferrol, después de que la cámara ferrolana entrase en liquidación. Según explicó el pasado martes Marcelo Castro-Rial, presidente de la entidad coruñesa, están dispuestos a asumir estos servicios pero a cambio de determinadas «garantías» por parte de la Xunta.
Básicamente, la Cámara de A Coruña, aunque está saneada, quiere blindarse contra posibles responsabilidades derivadas de la quiebra de la Cámara de Ferrol, que llegó a acumular hasta 6 millones de deuda.
Situación delicada en Ourense
Queda la incógnita de la Cámara de Ourense, que por ahora también figura como uno de los puntos rojos en el mapa gallego. Acumula tres años cerrando con déficit, de 400.000 euros en 2012, de 360.000 al año siguiente y de 350.000 en 2014.
La viabilidad del organismo pasa, a priori, porque Xunta o Deputación de Ourense se decidan a inyectar fondos públicos de cara a aliviar la tesorería de la entidad, que según afirmó ante los medios su presidente Juan Carlos Parada a finales de abril, no tiene liquidez, «pero tampoco deudas».