Uniqlo, el Zara japonés, da un vuelco a su política salarial y anuncia subidas de hasta el 40%
Fast Retailing, dueña de la cadena de moda, revisará salarios a partir de marzo con subidas que alcanzarán hasta el 40%; quiere hacer evaluaciones personales de cada trabajador para decidir su sueldo
Fast Retailing, dueño de una de las mayores cadenas de moda del mundo, Uniqlo, ha anunciado una revisión de su sistema de remuneración el próximo marzo, que conllevará subidas salariales para sus trabajadores. El conocido como Zara japonés señala que ya ha avanzado en esta revisión en algunos mercados, fundamentalmente en Japón, con subidas de sueldos que alcanzan hasta el 40%.
La nueva política salarial de Fast Retailing llega en un momento de fuertes incrementos en la retribución de la plantilla en diversas multinacionales debido a la inflación, como sucedió con Inditex en el caso del personal de tiendas. De hecho, el gigante textil de Amancio Ortega iniciará este mes una nueva negociación para acordar una política salarial que evite la pérdida de poder adquisitivo de los empleados. Al menos, con esa intención se sentarán a la mesa de negociación los sindicatos mayoritarios en el Estado, CCOO y UGT.
En el caso del dueño de Uniqlo, los incrementos salariales afectarán tanto a los empleados de oficina como a los trabajadores de las tiendas, aunque la compañía japonesa no lo vincula directamente a la inflación. Según el grupo, se trata de «remunerar a todos y cada uno de los empleados de forma adecuada a su ambición y talento, así como aumentar el potencial de crecimiento y la competitividad de la empresa de acuerdo con los estándares globales».
Evaluaciones personalizadas
El grupo definirá las capacidades y requisitos deseados para cada categoría y nivel ocupacional y aumentará el nivel de remuneración de los grados asignados a cada empleado hasta en un 40%. «Fast Retailing planea aprovechar esta oportunidad para igualar la realidad de la estructura de gestión plana y altamente maniobrable de la compañía. Teniendo esto en cuenta, la remuneración comprenderá elementos tales como el salario base y un bono determinado por los resultados de desempeño de cada período, mientras que se eliminarán las asignaciones basadas en el puesto que actualmente existen en Japón», dice la compañía.
Esto implica que la remuneración futura de los empleados se definirá con criterios alineados de manera global y que incluirán factores como el desempeño y los resultados del trabajo, la capacidad de contribuir al negocio, la ambición y el crecimiento. Para poder aplicar este programa es necesario realizar «una evaluación de grado justa a través de una evaluación meticulosa del desempeño por parte del supervisor y una evaluación exhaustiva de la alta dirección y del departamento de Recursos Humanos».
A modo de ejemplo, el propietario de Uniqlo detalla los incrementos salariales aplicados en Japón, donde reconoce que las retribuciones eran relativamente bajas. «El salario mensual de un empleado graduado universitario recién incorporado aumentará de los 255.000 yenes actuales a 300.000 yenes (unos 2.100 euros), un aumento salarial anual de aproximadamente el 18%; y el salario de alguien que asume un nuevo rol como gerente de tienda en su primer o segundo año aumentará de 290,000 yenes a 390,000, aproximadamente un 36%», expone la compañía, asegurando que en otros empleados alcanzará el 40%.
Un cambio organizativo y cultural
La idea plantea algunos problemas. Más allá de la eficacia de las evaluaciones, también debe disponer una estructura lo suficientemente permeable a las aportaciones del personal y a la generación de valor por parte de los empleados. Fast Retailing indica que fomentará una estructura horizontal y un estilo de trabajo que promueva la resolución de problemas.
«La empresa pretende lograr una estructura horizontal con alta maniobrabilidad, donde cualquier persona pueda sacar a la luz los problemas desde el punto de vista de los clientes y de toda la empresa, y plantearlos con franqueza, independientemente del departamento del que forme parte, convirtiéndose en un equipo que incluya a todos desde el personal hasta los ejecutivos y promoviendo la creación de una cultura corporativa que trabaje para implementar soluciones», expone.