Un juez condena a un pazo de Ferrol por celebrar bodas durante años sin tener licencia
Desde la Asociación de Emprendedores de Galicia (ASCEGA) denuncian que más de la mitad del sector en la comunidad autónoma carece de los permisos necesarios para desarrollar su actividad
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Ferrol obliga al Pazo da Merced, en Neda, a dejar de albergar bodas y banquetes por encontrarse en suelo rústico y carecer de título habilitante de naturaleza urbanística, quedando así desprovisto de licencia.
Desde la Asociación de Emprendedores de Galicia (ASCEGA) denuncian que más de la mitad del sector en la comunidad autónoma carece de los permisos necesarios para desarrollar su actividad. “Hemos constatado que hay un porcentaje muy elevado de empresas que se dedican a eventos que no cumplen con la legalidad vigente”, lamentan.
Recorrido del caso
En el año 2010 se solicitó la implantación de una instalación “efímera” para ampliar los locales ya existentes en el interior del pazo, y se vinculó a la solicitud de una licencia para realizar actividades de restauración que, advierte el juzgado, no consta que
se hubiese otorgado. El Pazo da Merced estuvo, de esta manera, sirviendo comidas durante todo este tiempo sin tener el permiso preceptivo definido por ley.
Más tarde, en abril de 2012, se inició contra el Pazo da Merced un expediente sancionador y de reposición de la legalidad por realizar obras sin autorización del Dominio Público Marítimo Terrestre, que denegó su legalización dos años después. El juzgado estima en su sentencia que fue correcta la actuación del Concello demandado al suspender los usos del suelo y remitir a la Axencia de Protección de la Legalidad Urbanística (APLU) de la Xunta de Galicia los hechos que constataron “al apreciar la concurrencia de obras y usos realizados en suelo rústico y que no contaba con el título habilitante para ello”.
El propio Pazo da Merced apunta en su alegación, según explica la sentencia, que el APLU ya le había requerido en marzo de 2013 para que restituyera la legalidad en la finca y, por ello, solicitaba que la causa hubiese prescrito. Pero la jueza matiza en su auto que ese expediente no es objeto en el procedimiento que juzga, desestima el recurso e impone las costas del abogado del Concello a la parte demandante. La sociedad Pazo da Merced SL tiene quince días para interponer recurso de apelación ante el mismo juzgado.