Trabajo acusa a Alcoa de actuar de mala fe en el ERE
La Dirección General de Trabajo cuestiona la “voluntad negociadora” de Alcoa por la “extrema celeridad” con la que anunció los despidos en A Coruña y Avilés
Bronca de la Dirección General de Trabajo a Alcoa, la multinacional norteamericana que pretende cerrar las plantas de A Coruña y Avilés. El informe firmado por el director general de Trabajo, Ángel Allué, sobre el ERE extintivo para casi 700 trabajadores considera que la compañía no ha actuado “de buena fe” con los despidos y que no mostró una verdadera “voluntad negociadora” al presentar el expediente de regulación con “extrema celeridad”.
Las conclusiones de la Dirección General de Trabajo, ya trasladadas a la compañía norteamericana, trascendieron el mismo día que la ministra de Industria, Reyes Maroto, anunció que Alcoa ampliaría el periodo de consultas del ERE, que vencía a finales de este mes.
Falta de voluntad negociadora
Trabajo reprocha a la aluminera “la extrema celeridad” con que este expediente ha iniciado su tramitación sin una pre-negociación entre las partes, «lógica y de práctica habitual en grandes expedientes como el que nos ocupa». Este argumento sirve a la dirección adscrita al departamento de Magdalena Valerio para hablar de una ausencia de verdadera voluntad negociadora, máxime con la envergadura del mismo y sus muy graves repercusiones económicas y sociales en las regiones de Asturias y Galicia.
La Dirección General de Trabajo también advierte que, previo al inicio del periodo de consultas legalmente establecido, se deberían «haber arbitrado por las partes otras soluciones temporales más amplias» que permitiesen una negociación más acorde con el calado social de este expediente.
Trabajo pide “soluciones no traumáticas”
La autoridad laboral explica que una medida colectiva de cierre como la que plantea el Alcoa-Inespal «no debería sustanciarse sin un período negocial de suficiente y proporcionada duración» que permita a las partes, con la colaboración de las Administraciones públicas concernidas, «encontrar soluciones no traumáticas» que minimicen la repercusión social de las planteadas en este expediente.
Esa es la propuesta que el Ministerio de Industria y los propios trabajadores trasladaron a la compañía, sin que esta se sentara hasta ahora a negociar. Alcoa siguió adelante con el ERE, aunque no fue capaz de constituir la comisión de negociación por el plantón de los trabajadores.
Trabajo pide un periodo amplio
La Dirección General de Trabajo recomienda, no solo a constituir la mesa negociadora, «requisito decisivo de una negociación de buena fe», sino que se reflexione sobre la posibilidad de «abrir un período amplio de negociación fuera de los cortos límites temporales que establece la legislación vigente», a efectos de asegurar las posibilidades de encontrar soluciones positivas en este proceso, como así se viene produciendo en casos similares.