Toyota y Honda encuentran la solución a la crisis de los microchips: vender los coches más caros
Los fabricantes japoneses confían en elevar las ganancias este año ya que los recortes de producción por la falta de semiconductores permiten cobrar más a los clientes
Toyota y Honda son pesimistas respecto a la crisis de los microchips, pero optimistas en cuanto a sus ganancias. Los fabricantes japoneses explicaron este miércoles que la escasez de vehículos les ha permitido cobrar más a los clientes, compensando la menor producción. Además, se han beneficiado de la depreciación del yen frente a otras divisas con sus ventas en el extranjero.
Toyota mantuvo su previsión de beneficios para todo el año de 2,8 billones de yenes (24.250 millones de dólares), mientras que Honda mejoró su previsión de beneficios operativos para el año hasta el 31 de marzo en un 21 % hasta los 800.000 millones de yenes.
Continuará la crisis
En un encuentro con periodistas, los dos mayores fabricantes de automóviles de Japón auguraron que las interrupciones en la cadena de suministro y la escasez de chips seguirán afectando las operaciones. La respuesta, hasta ahora, ha sido la de reducir costes para ganar márgenes.
Además, informa Reuters, una menor producción significa que sus clientes están más dispuestos a comprar automóviles con menos incentivos financieros de los que suelen ofrecer.
Recortes de producción
Toyota recortó su objetivo de producción anual en medio millón más hasta los 8,5 millones de vehículos, mientras que Honda mantuvo su objetivo de 4,2 millones, aunque por debajo de los 4,85 millones que pretendía al comienzo del año comercial.
“No esperamos que el desequilibrio en el suministro de chips se resuelva rápidamente y el curso de la pandemia de coronavirus no está claro. Creemos que la incertidumbre continuará en el próximo año comercial», señalaron fuentes de la compañía.