Tino Fernández se hace internacional: casi la mitad de los ingresos de Altia proceden de fuera de España
Aunque España sigue siendo el principal mercado de Altia, la incorporación de la portuguesa Noesis amplía los horizontes de la tecnológica de Tino Fernández. El negocio prestado en el extranjero representa el 47% de los ingresos del grupo coruñés
Altia, la tecnológica coruñesa de Tino Fernández, se hizo internacional en plena pandemia. En realidad, hace años que la compañía gallega está presente en el mercado extranjero, sin embargo, su peso en el exterior ha crecido notablemente con la integración de la portuguesa Noesis. Según indica en su memoria de sostenibilidad, recientemente publicada, el efecto de la incorporación del grupo luso hizo que a finales de 2020 casi un 47% de sus ingresos totales deriven de “negocio prestado fuera de España”.
A pesar del crecimiento, España sigue siendo el principal mercado de la compañía. “Así, el 53,7% de los ingresos provienen de negocio realizado en España, un 22,6 % proviene de Portugal, un 20,2% del resto de Europa y un 3,4% del resto del mundo”, indica la firma, que cotiza en el antiguo Mercado Alternativo Bursátil (MAB).
Casi 30 millones en Portugal
Para los de Tino Fernández, el crecimiento en el mercado extranjero ayudará a la tecnológica a minimizar riesgos. “Esta expansión a nivel internacional, se complementa con una incipiente diversificación en cuanto a presencia en territorios que fortalece el modelo de negocio del grupo, minimizando un riesgo de excesiva dependencia de uno u otro mercado”, apunta.
Durante en 2020, la compañía coruñesa disparó su facturación, que pasó de un 70,7 a casi 130 millones de euros. Las ventas en el mercado español se incrementaron cerca de un 30%, hasta los 69,7 millones de euros, mientras que, derivado de la adquisición de Noesis, las ventas en el mercado portugués rozaron los 30 millones. También experimentaron un notable crecimiento las operaciones en el resto de Europa. Porcentualmente, un 90%, al pasar de 13,7 millones de euros a 26,2 millones, algo determinado por “el negocio vinculado a agencias europeas”. En el resto de mundo, Altia triplicó sus ventas, al pasar de un millón a 4,4 millones de euros.
El sector público reduce su peso
La cifra de negocios de la compañía con sede en Oleiros se disparó un 83%, si bien es cierto que el beneficio neto se situó en los 6,2 millones, apenas un 4% por debajo de los 6,5 millones registrados el año anterior. Este estancamiento de beneficios, pese al crecimiento de las ventas, menguó el margen neto de la firma, que descendió del 9,7% al 4,8% en un año en que inyectó más de 3,5 millones en Noesis.
Los administradores de la compañía explican en su memoria de sostenibilidad que, en cuanto a la distribución del negocio por sectores, en términos absolutos todos han creciendo, si bien en términos relativos el peso del sector público bajó del 46% al 27,8%, un hecho “que se explica principalmente porque la estructura de clientes de Noesis, a diferencia de la de Altia, se centra casi en exclusiva en el sector privado”.