Tino Fernández: “En tecnología no estamos para elegir trabajadores, se coge todo”

El presidente de Altia asegura que incorporan incluso a alumnos de informática que “todavía no saben darle una patada a un bote” con la esperanza de que vuelvan cuando terminen la carrera

Constantino Fernández, presidente de Altia, participó este viernes en O Encontro, organizado por CESUGA en A Toxa

Constantino Fernández, presidente de Altia, participó este viernes en O Encontro, organizado por CESUGA en A Toxa

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No solo la hostelería tiene problemas para encontrar trabajadores. La atracción del talento es también un reto para el sector tecnológico y nada tiene que ver con los salarios. El volumen de trabajadores no alcanza para la elevada carga de trabajo, especialmente en un mercado global en el que un programador puede trabajar desde Galicia para una empresa de Holanda, por ejemplo.

La segunda jornada de O Encontro, el evento organizado por CESUGA en la Illa de A Toxa y pone el foco en esta edición en las personas y el talento, puso de manifiesto esta problemática. El presidente de Altia, que participaba en un panel sobre el talento emprendedor en la empresa, zanjó rápidamente el debate: «En tecnología no estamos para elegir, se coge todo. Si tiene las competencias, si ha hecho el grado o FP y quiere venir, que venga».

Tino Fernández matizó que luego tienes que hacer un programa de acogimiento y tutorización del nuevo empleado para que se adapte a sus funciones en la empresa, pero la demanda de trabajadores es constante. «Si uno de segundo de informática, que todavía no sabe darle una patada a un bote, quiere venir, que venga también. Pero pagándole, ojo. Porque lo que se intenta es que cuando termine, a lo mejor, se acuerda de ti», reconoció.

De Luckia a Calvo y Vegalsa: el problema va por sectores

Las palabras del fundador de la consultora tecnológica coruñesa y ex presidente del Deportivo contrastaban con las de Mané Calvo y Joaquín González, que en el mismo evento reflexionaban el jueves sobre cómo seleccionar y conseguir una plantilla satisfecha. Las tecnológicas como Altia, dice su presidente, no tienen margen para elegir.

No es una idea nueva. Luckia, el grupo del juego que dirige José González, anunció que construiría una nueva sede en A Coruña con una inversión de 15 millones. Uno de los objetivos que persigue la compañía es tener un espacio atractivo que resulte un incentivo para la atracción de talento tecnológico.

El «chollo» del talento senior

Tino Fernández explicó que es «muy fan» del talento senior. «No entiendo que pueda echarse talento así, cuando llegan a los 55 años, si están súper en forma. Ese trabajador me parece un chollo. Normalmente llegan con la vida resuelta porque se llevan mucha pasta cuando se van de su otra empresa. Probablemente los hijos ya se están marchando de casa o construyendo su vida, por lo que están más liberados. Si encajan con lo que quieres hacer, son un chollo», razonó.

El presidente de Altia también dio importancia al aprovechamiento del talento dentro de la empresa. «Innovar es convertir ideas en talento», zanjó el empresario. «Tenemos un programa para detectar y acelerar ideas dentro de la organización. Somos muchos empleados y tenemos una grandísima fuente en eso. Y lo remuneramos», aseguró.

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