¿Sostenibilidad? Inditex levanta un bosque en su sede central

Inditex ya piensa en verde. Desde hace unos años, la apuesta por la sostenibilidad se ha convertido en una constante en el imperio textil de Amancio Ortega. Tanto es así que, en estos momentos, la compañía acomete unas obras en su sede central, en Arteixo, que derivarán en la construcción de un aparcamiento dotado con placas fotovoltaicas, seguido de un bosque urbano donde se apostará por las especies autóctonas. La extensión ronda los 30.000 metros cuadrados, el equivalente a seis campos de fútbol.

La apuesta ‘verde’ de la central de Inditex

Los trabajos se desarrollan en la antigua parcela de la compañía Emesa, que fue adquirida por la multinacional textil con el objetivo de ampliar sus instalaciones centrales, que dan trabajo a más de 3.500 personas (al margen de las que trabajan en la planta de Zara Logística, también situada en el municipio coruñés y que superan el millar de trabajadores).

Según explican distintas fuentes del entorno de la firma textil, la construcción de esta suerte de bosque urbano deriva, en gran medida, “de la fuerte apuesta por la sostenibilidad y el cuidado del medioambiente hecha por el grupo”. Algo que ha llevado, por ejemplo, a que en el comedor de las oficinas centrales de Inditex se primen los productos ecológicos y de proximidad.

Objetivo: consumo renovable al 80%

Ya a finales del pasado año, el presidente de la textil, Pablo Isla, explicó que la estrategia del grupo para este 2020 se centraría en dos patas: una, la de la potenciación del mercado online, y otra, la del compromiso sostenible de la firma gallega. De hecho, el directivo explicó que el objetivo de Inditex es que las fuentes renovables representen el 80% de su consumo en 2025, un camino que arrancaba “con el inicio inminente de la instalación de paneles fotovoltaicos adicionales en la sede de Arteixo”.

Vista exterior del bosque urbano que Inditex levanta en Arteixo

Estos paneles fotovoltaicos se instalarán en la cubierta del aparcamiento en superficie que Inditex ha comenzado ya a acometer. Según distintas fuentes, este espacio ocupará menos de la mitad de la gran parcela en la que se obra. El resto, hasta los 30.000 metros cuadrados, se dedicarán a la creación de un considerable espacio verde.

El medio ambiente, la ‘obsesión’ de Ortega

Según aclaran distintas voces desde dentro de la compañía, el convertir a Inditex en una firma realmente sostenible es un empeño personal del propio Ortega, “muy concienciado en este tema en buena parte por su hija Marta”. El proyecto presentado por Inditex al ayuntamiento de Arteixo para conseguir los permisos de obra indica que la actuación tendrá un coste de casi 4 millones de euros.

Esta no es la única obra que se acomete en estos momentos en el corazón de Inditex. Las obras de construcción de un gigantesco estudio para Zara.com están ya muy encarriladas. El nuevo edificio, de 63.000 metros cuadrados, albergará “todas las infraestructuras necesarias para las producciones audiovisuales” y, también en este caso, será sostenible. “El edificio estará dotado de los sistemas más avanzados de ecoeficiencia, tanto en su construcción como en su posterior gestión de residuos y de energía”, apuntan.

Inditex se lanza a la moda sostenible

La creación del bosque urbano y la apuesta por las energías verdes se complementa con el impulso que Inditex está imprimiendo en los últimos años a su colección de moda sostenible: Join Life. El grupo con sede en Arteixo ha extendido de Zara a Bershka y Oysho esta línea de prendas sostenibles a base de materiales como el algodón orgánico (cultivado sin pesticidas ni fertilizantes).

El grupo fundado por Amancio Ortega cuenta con un departamento propio desde el que trabaja en este ámbito y en el que el mes pasado se produjo un relevo. La compañía nombró a Javier Losada nuevo director del área de sostenibilidad, mientras que Miguel Díaz, hasta entonces director financiero de Zara, pasó a asumir la dirección de sostenibilidad de la principal marca del grupo.