Sonae saca petróleo de las perfumerías Arenal, que cuadruplican beneficios tras el Covid
La cadena que dirige Rafael Marzán ganó 6,4 millones, un 311% más, en su tercer año bajo el control de la portuguesa Sonae
Como cabía esperar, el final de las restricciones por el Covid ha impulsado los números de Arenal Perfumerías, que sufrió durante 2020 los cierres de establecimientos aplicados por las administraciones para evitar la propagación del virus. La compañía ha crecido de manera significativa, elevando un 35% las ventas y recuperando las cifras previas a la pandemia, tal y como había anticipado el accionista de control del grupo, la portuguesa Sonae, cuando presentó sus resultados anuales.
La firma lusa señalaba que la cadena lucense había superado los 156,6 millones en ventas, como así muestran las cuentas de la empresa. De hecho, los ingresos superan los 160 millones si se suma la prestación de servicios. Es la primera vez que supera esta cota. Lo que no detallaba Sonae eran los beneficios, que se dispararon hasta los 6,4 millones, un 311% más que los 1,5 millones del ejercicio de la pandemia.
Entre Galicia y Portugal
El grupo que dirige Rafael Marzán, representante de la familia fundadora que todavía conserva el 40% del capital, se situó rápidamente por encima de las cifras previas al Covid, pues en 2019 facturó 129 millones y obtuvo 5,5 millones de beneficios. En enero de aquel año, Sonae, la multinacional propietaria de Worten o de los hipermercados Continente, formalizó la compra del 60% de Tomenider, el accionista único de Arenal.
Esta sociedad sí que registró pérdidas durante los peores momentos de la pandemia, anotándose un resultado negativo de 3,2 millones en 2020 debido a los mayores gastos y los deterioros por amortización de inmovilizado. El pasado ejercicio volvió a beneficios de 1,5 millones, según las cuentas depositadas en el Registro Mercantil.
Hacia el millar de trabajadores
Arenal contaba con una plantilla a 31 de diciembre de 841 trabajadores, aunque los últimos datos actualizados en su página web hablan ya de más de 900 empleados y 54 establecimientos dedicados a la venta de cosméticos, perfumes y productos de droguería y parafarmacia. Además de en Galicia, la cadena lucense tiene presencia en Asturias, Cantabria, País Vasco, Castilla y León y Navarra.
El salto tras el Covid se percibió en todas las magnitudes. El patrimonio de la empresa se incrementó hasta los 36 millones, seis más que en el cierre de 2020; el resultado de explotación prácticamente se triplicó, alcanzando los 8,7 millones. El grupo sumaba casi 100 millones en activos al cierre del ejercicio.