Sodecar busca desactivar la fusión entre Dinamia y N 1
Ante la dilución de su inversión, la familia Carvajal negocia adhesiones para lograr sacar adelante un dividendo extraordinario de 2,5 euros por acción
Sodecar, la empresa a través de la que la familia Carvajal ostenta el 3,76% del capital de Dinamia, la única sociedad de capital riesgo cotizada, lo tiene complicado para intentar desactivar la fusión diseñada para que N 1, la gestora de Dinamia, pase a controlar la mayoría del capital de la sociedad resultante. Pero lo va a intentar.
«Nosotros no estamos en contra de la fusión. De lo que estamos en contra es de valoración», asegura un portavoz de la familia Carvajal. No entienden cómo los accionistas de Dinamia, la teórica sociedad absorbente, se quedarán con el 43% de la nueva sociedad resultante, mientras que los de N 1 –la sociedad absorbida y extinguida– contarán con el 57% restante.
Sobre todo cuando Dinamia duplicó en 2014 los beneficios de N 1, hasta los 28,3 millones de euros y, además, sus fondos propios de casi 135 millones triplican ampliamente los algo más de 40 millones que contabilizaba N 1.
Orden del día ampliada
Esa es la razón por la que, ante la insistencia ante la dirección de Dinamia, Sodecar ha logrado colar dos puntos alternativos en el orden del día de la junta de accionistas, que se celebrará el próximo 29 de abril.
Un primer acuerdo de repartir, a los accionistas de Dinamia, un dividendo extraordinario con cargo a la prima de emisión o en la forma societaria que se determine en la junta, de 2,5 euros por acción. Y un segundo, que busca echar por tierra la fusión y poner en valor para su venta todas las participaciones de la sociedad de capital riesgo de cara a repartir, entre los accionistas, lo obtenido en las ventas.
Dividendo con el dinero de la caja
Los 2,5 euros por acción de dividendo extraordinario planteado por la familia Carvajal no se ha elegido al azar. Si multiplicamos ese precio por los casi 16,3 millones de acciones de Dinamia salen 40,7 millones de euros. Los que actualmente existen en la caja de la sociedad.
«La familia Carvajal sabe que será difícil sacar la propuesta adelante, pero está manteniendo reuniones con varios accionistas para tratar de alcanzar el 15% del capital necesario para lograrlo», explica el portavoz de Sodecar.
Especulaciones abiertas
biertas No resultará fácil. Deberá lograr que se adhieran accionistas que sumen casi un 12%, teniendo en cuenta que Sodecar solo cuenta con el 3,76% de Dinamia. A partir de aquí se abren todas las especulaciones y cada accionista deberá echar sus cálculos para ver lo que más le conviene.
Para la familia Sodecar sacar adelante el dividendo extraordinario es la única vía para evitar que, con la fusión prevista, la dilución de su participación le haga perder más de la mitad de los 18 millones invertidos hace ocho años, cuando adquirieron el paquete de más de 600.000 títulos en el momento en que Dinamia cotizaba a sus máximos históricos de 30 euros. De lograrlo se embolsaría más de 15 millones.
Apoyos difíciles de Sodecar
Para recabar apoyos, Sodecar no lo tiene fácil. Gonzalo Hinojosa, el ex presidente de Cortefiel, uno de los que podrían hacerlo hecho, decidió, antes de Semana Santa, vender las acciones que mantenía en Dinamia, tanto de manera personal como indirectamente a través de Aquamagica Inversiones.
También se conocía hace unos días, en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con más de un año de retraso, la venta de acciones de Dinamia que había llevado a cabo Entur-99, la empresa barcelonesa de intermediación controlada por Buenaventura Durall Rafols, para quedarse con casi el 3%.
Entre los pequeños accionistas de Dinamia también figura Corporación Financiera Arco, con el 2,86%. Una compañía de inversiones presidida por European Wines, una sociedad radicada en Luxemburgo.
Gestora de Banco Madrid
En el accionariado de la sociedad presidida por Santiago Bergareche se encuentra, asimismo, la gestora de activos de Banco Madrid, que, justo un mes antes de ser intervenida por el Banco de España como filial de BPA, comunicaba a la CNMV la detección de un incremento de las acciones controladas, de 481.339 a 506.339, en los procesos de control realizados durante el pasado mes de diciembre.
El resto de los accionistas, con mayor presencia en Dinamia, queda encabezado por Ricardo Portabella, uno de los principales interesados en que salga adelante la fusión y con el que la familia Carvajal poco tiene que hacer. Portabella, además de ser el máximo accionista de Dinamia con más del 26%, a través de Anpora Patrimonio, es el presidente de N 1 Internacional.
Respuesta de Dinamia a Sodecar
El consejo de Dinamia, tras aceptar incluir las propuestas de Sodecar en el orden del día de la junta de accionistas, ya ha dejado clara su postura totalmente contraria a los intereses que persigue la familia Carvajal.
Entiende que las propuestas de acuerdos que formula Sodecar, que implicarían la liquidación progresiva de la cartera de participadas, darían lugar a un «escenario incierto tanto desde el punto de vista del resultado como del momento en que quedaría completado el proceso de desinversión y el reparto de su producto entre los accionistas».
Liquidación inapropiada
«En dicho escenario de liquidación progresiva la presión a la baja sobre el precio de venta de las participadas sería más intensa y, con toda probabilidad, las garantías exigidas por los compradores en relación con potenciales contingencias serían mayores en cuantía y en duración», añaden.
Por ello, el consejo de Dinamia, con Santiago Bergareche al frente, considera particularmente inapropiado plantear una liquidación general de la cartera de participadas de Dinamia en un momento del ciclo como el actual. Y, por ello, se reafirma en la necesidad de llevar a cabo el previsto proceso de fusión con N 1.