Siemens Gamesa duplica pérdidas afectada por los fallos en sus aerogeneradores
El fabricante consigue elevar un 10% las ventas en su primer trimestre fiscal, pero las provisiones por turbinas defectuosas engordan los números rojos
Los primeros resultados de Siemens Gamesa tras su exclusión de bolsa vuelven a ser negativos. El fabricante que bajó la persiana de su planta de As Somozas continúa acumulando pérdidas en un entorno condicionado por los altos costes y los problemas en la cadena de suministro. En su primer trimestre fiscal, la compañía registró números rojos por valor de 884 millones, más del doble que en el mismo periodo del año anterior.
Gamesa indica que el balance está «afectado por el resultado de la monitorización periódica y evaluación técnica de fallos de la flota instalada». Los aerogeneradores defectuosos han supuesto un impacto de 472 millones en el ebit pre PPA y antes de costes de integración y reestructuración. «Durante dicha evaluación se ha detectado una evolución negativa de las tasas de fallos en componentes específicos, lo que resulta en gastos de mantenimiento de servicio y garantía más altos de lo estimado previamente», dice el grupo, que ya había advertido a mediados de enero de los problemas en sus turbinas.
Además de las mayores provisiones, añade que los resultados también reflejan «el impacto de un nivel de costes elevado, que ya se había anticipado, del lanzamiento de nuevas plataformas, la introducción de nueva capacidad de fabricación y la ejecución de proyectos onshore onerosos».
Los números de Siemens Gamesa
En este contexto, Siemens Gamesa logró elevar las ventas un 10%, hasta los 2.008 millones, mientras que el ebit pre PPA y antes de costes de reestructuración se fue a los 760 millones en negativo, frente a los 309 millones, también negativos, del primer trimestre de 2022. Equivale a un margen de -37,8% sobre las ventas del trimestre.
Estas se vieron «severamente afectadas por disrupciones en el suministro de componentes, especialmente en la
actividad de fabricación offshore«, dice la compañía, que logró elevar un 13% las ventas de aerogeneradores, hasta los 1.580 millones, mientras que mantuvo estables los ingresos por servicios.
La compañía tiene en marcha un plan de reestructuración denominado Mistral, que conllevará la salida de 2.900 trabajadores, unos 350 en España, con el objetivo de regresar a la rentabilidad tras tres años acumulando números rojos.