Sidenor, pretendiente de Alcoa, augura que el precio de la luz hundirá al sector en menos de seis meses
El presidente de la acería vasca, José Antonio Jainaga, ha alertado de que las empresas del sector "se irán al hoyo" por el precio de la electricidad, cuyas tarifas actuales superan los 200 euros por MWh
Futuro negro para el sector fabril. El presidente de Sidenor, José Antonio Jainaga, se ha mostrado muy negativo con la situación de la industria por las repercusiones que tiene el precio actual de la electricidad. El directivo vasco de uno de los principales pretendientes de Alcoa ha asegurado que el coste de la luz llevará «al hoyo» a muchas compañías del sector, que no aguantarán «más de seis meses».
Jainaga se ha pronunciado de esta manera en una jornada organizada en Bilbao por Norbolsa, en la que el empresario, que es también presidente de la Asociación de Grandes Consumidores de Energía, aunque ha avisado de que hoy solo hablaba como directivo de Sidenor, ha alertado del agravio que supone que las tarifas actuales de la electricidad superen los 200 euros por MWh.
El presidente de la acería vasca ha discrepado con la consejera delegada de Iberdrola España, Ángeles Santamaría, con quien ha coincidido en el evento. Esta última contrastó la postura negativa de Jainaga y aseguró que casi el 90% de la energía que se vende está a precio fijo, de manera que la inmensa mayoría de sus siete millones de clientes «siguen pensando lo mismo que antes de la crisis, tienen precios estables y no se han visto afectados por las subidas en el mercado mayorista».
Parón por la luz en Sidenor
La voz de alarma del presidente de Sidenor va acorde con la situación de la empresa. La planta que la acería tiene en Basauri (Bizkaia) se ha visto obligada a parar la producción de forma intermitente hasta Navidades ante el “desorbitado” precio que paga por la electricidad. En el último año se ha incrementado en más de un 300% su factura de la luz, al pasar de 60 euros el megavatio hora a 260 euros.
La compañía explicó en un comunicado que “ese incremento del coste eléctrico supone unos 200 euros más por tonelada, o sea, un aumento de los costes de fabricación de más del 25%”, que “provoca pérdidas y hace imposible mantener el ritmo actual de producción”.
Ahora, Jainaga teme que la situación a la que se ha visto sometida la empresa se extienda a todo el sector o a una parte importante de él si no se moderan los precios de la electricidad ni se ofrece algún modo de solventar el problema.