Sandra Ortega y Castellano luchan por el turismo del lujo peninsular
La hija de Amancio Ortega impulsa un resort de lujo en Portugal con Ferrado Nacomporta y la socimi del exconsejero delegado de Inditex lo hace en Cádiz
Hasta ahora, lo único que unía a Sandra Ortega y a José María Castellano era que ambos formaban parte del selecto grupo de personas que conforman el universo Inditex. La primera, la empresaria más rica de España según Forbes, es hija de Amancio Ortega y Rosalía Mera y, en la actualidad y fruto de la herencia recibida tras el fallecimiento de la cofundadora de la textil, ostenta un 5% de las acciones de Inditex. El segundo llegó a ser consejero delegado y vicepresidente de la mayor empresa del Ibex35 y a él se le atribuye la salida a bolsa del gigante textil. No obstante, desde hace unos meses, el currículum de ambos ha ganado un nuevo punto de encuentro. Los dos, Ortega a través de Ferrado de Inmuebles y Castellano con Millenium Hotels, apuestan decididamente en sus negocios por el turismo del lujo. No por casualidad, ambos tiene en marcha proyectos similares basados en la construcción de resorts de alto nivel en nuevas zonas turísticas ubicadas en Troia (Portugal) y Cádiz.
La apuesta por el ladrillo de Sandra Ortega
Al igual que en vida hizo Rosalía Mera, Sandra Ortega, a través de su brazo inversor, Rosp Corunna, tiene en el ladrillo su segundo mayor negocio después de Inditex (su principal fuente de ingresos la obtiene de los millonarios dividendos que le reporta su paquete accionarial). La empresaria gallega tiene un 30% de la empresa de hoteles Room Mate, de Kike Sarasola, pero, además, también vuela en solitaria en el terreno inmobiliario con activos en España, Portugal, resto de Europa y Norteamérica que pilota a través de Ferrado de Inmuebles. Una de las sociedades que cuelga de esta es Ferrado Nacomporta, a través de la que ha puesto en marcha el millonario proyecto turístico que se desarrolla en Troia, al sur de Lisboa, cerca de Setubal.
La aventura portuguesa arrancó en 2016. Entonces, la firma Soltroia (filial del gigante luso Sonae Capital) y Rosp Corunna firmaron un acuerdo de compra de activos inmobiliarios en Troia por unos 50 millones de euros.
Luz verde del Gobierno luso
Hace unas semanas, el gobierno portugués dio luz verde al desarrollo del proyecto, una suerte de resort de lujo ‘ecológico’. Fue en el consejo de ministros del pasado 19 de diciembre cuando el Ejecutivo luso indicó que el proyecto en Troia tiene una inversión aparejada de 164,1 millones de euros y prevé la creación de 318 puestos de trabajo hasta el 31 de diciembre de 2023. Por su dimensión, el Gobierno le ha conferido un “particular interés para la economía nacional”, motivo por el que, además, se ha hecho merecedor de una serie de beneficios fiscales sobre el impuesto de sociedades.
Troia, a una hora de distancia de Lisboa, comercializa los terrenos más caros y los desarrollos más lujosos de la costa entre el Algarve y la isla de Toralla. La extensión de terreno adquirida por Sandra Ortega asciende a 194 hectáreas y, según especifica el portafolio de Sonae, una parte del terreno es no edificable y se destinaría a un gran campo de golf. En el resto de parcelas se pueden levantar hasta 556 apartamentos de lujo flanqueados por uno o dos hoteles.
La socimi de Castellano
Pero, la hija de Amancio Ortega no es la única que apuesta por el turismo del lujo. También lo hace José María Castellano, accionista de referencia de la socimi (sociedad cotizada anónima de inversión en el mercado inmobiliario) Millenium Hotels Real Estate.
Casualmente, casi a la vez que el proyecto luso de Sandra Ortega recibía el plácet del Gobierno luso, la socimi anunciaba su intención de desarrollar una ciudad del lujo en Cádiz. A finales del mes de diciembre, el grupo inversor anunció que se había hecho con terrenos en primera línea de playa cercanos a Sotogrande por 33,2 millones de euros.
La operación incluye un terreno de 90.000 metros cuadrados en la finca la Hacienda de San Roque y las sociedades Alcaidesa Holding y Alcaidesa Golf, que cuentan entre otros activos, con un solar urbano de 50.000 metros cuadrados de uso residencial y hotelero, dos campos de golf y una casa club de más de 5.000 metros cuadrados.
El complejo proyectado, de cinco estrellas y casi 400 habitaciones (150 en el edificio principal y el resto en 53 villas), dispondrá de varias piscinas, gimnasio, spa, zonas deportivas, salones para eventos, restaurantes y los dos campos de golf, de 18 hoyos (Alcaidesa Link y Heathland Golf).
El que también llegó a ser presidente de Novagalicia Banco es el tercer accionista de la socimi con un 5,6% de su capital. Por delante se encuentra la firma Ibervalle, controlada por la familia Isidro, con el 24,7 % y Pelham Capital, con el 9,93%. Al igual que Castellano, Siemprelara, controlada por Leopoldo del Pino, también ostenta un paquete accionarial del 5,6%.
Las nuevas ‘ibizas’
Ambas ubicaciones vacacionales, la escogida por Sandra Ortega y la de Castellano, están al alza y, por tanto, se convierten en potenciales competidoras en el mercado del lujo. Desde hace tiempo, grandes personalidades tienen por costumbre veranear en la zona de Troia y Composta (en 2016 salió a la venta un palacete ubicado en Setúbal que perteneció a Jackie Onassis), sin embargo, desde el sector aseguran que el despegue definitivo le ha llegado en los últimos años, cuando la zona ha comenzado a ser denominada la Ibiza portuguesa por el mismísimo The Wall Street Journal, que también la compara con los exclusivos Hamptons de Estados Unidos.
Por su parte, Javier Illán, el presidente de la socimi Millenium, asegura que la costa gaditana, a pesar de contar con unas de las mejores playas de España y grandes atractivos turísticos, «es probablemente la menos desarrollada en proyectos hoteleros modernos de alta calidad». Dice que el futuro complejo que acometerá está llamado a ser “el más exclusivo del sur de Europa”.