Sandra Ortega aumenta la aportación a su obra social pese al golpe el Covid a sus negocios
La hija del fundador de Inditex, que se sumó a las donaciones para enfrentar la crisis sanitaria del coronavirus, eleva un 45% su aportación a la Fundación Paideia
La Fundación Paideia Galiza, la obra social que puso en marcha Rosalía Mera y que preside su hija, Sandra Ortega, contó el pasado año con un presupuesto de 2,3 millones, elevando levemente el cerrado en 2019, que había alcanzado os 2,23 millones. A falta del cierre contable del ejercicio para precisar los números, la institución recibió una inyección de 868.000 euros de Rosp Corunna, el brazo inversor de la hija de Amancio Ortega, lo que supone un 45% más que los 600.000 euros aportados en 2019.
En el año del Covid-19, Sandra Ortega destinó más fondos a la obra social además de la donación de un millón de unidades de material sanitario –mascarillas y trajes– que realizó para combatir la pandemia. El resto del presupuesto de Paideia se generó por su propia actividad, con ingresos de 1,16 millones, y de subvenciones y ayudas de Xunta, Diputación de A Coruña y fondos europeos.
La entidad realiza la mayor parte de su gasto en emprendimiento, a través del centro de iniciativas empresariales Mans y del estudio Mans para la promoción y grabación de bandas emergentes. La de discapacidad y empleo es la segunda partida más importante, con el proyecto Antear de capacitación para jóvenes que sufren una discapacidad, y el grupo de empresas Trébore, con actividades como la jardinería o el diseño gráfico y de regalos de empresa. El desarrollo territorial (Asociación Deloa), la divulgación o la juventud y movilidad conforman el resto de programas de la institución.
Año para olvidar en los negocios
La aportación de Sandra Ortega equivale a un 1,5% de los ingresos que percibió Rosp Corunna por el dividendo de Inditex, que ascendieron a 55,1 millones el año pasado. Debido a la pandemia, la retribución de la multinacional cayó bruscamente, disminuyendo los ingresos percibidos por la hija del fundador, titular de algo más del 5% del capital, a menos de la mitad, pues en 2019 percibió 138,5 millones.
Fue uno de los datos clave que empujaron a las pérdidas al grupo de la mujer más rica de España, que cerró el ejercicio con números rojos de 91 millones. Pero lo cierto es que las inversiones de Rosp Corunna acumulan problemas, como la participación en la cadena hotelera Room Mate que tiene a la venta (un 30%) o las cuantiosas pérdidas de su inmobiliaria Ferrado Inmuebles, con un resultado negativo de 128 millones por el impacto de la pandemia, que conllevó la depreciación de activos, el aplazamiento en el cobro de alquileres o la paralización de la actividad hotelera.