Revuelta de los pescadores franceses contra el parque eólico de Iberdrola que da aire a Navantia Fene
El Comité de Pesca de Côtes d’Armor pide una investigación por vertidos y la paralización del parque eólico marino de Saint Brieuc, cuyos 62 aerogeneradores se asientan sobre 'jackets' fabricados por Navantia en Fene
El sector pesquero francés se planta contra el parque eólico marino que Iberdrola está construyendo en la bahía de Saint Brieuc. El Comité de Pesca del departamento de Côtes d’Armor (en la Bretaña francesa) ha presentado una denuncia contra Ailes Marines, una filial de la firma que preside Ignacio Sánchez Galán, tras detectar una serie de vertidos durante las obras que, a su juicio, ponen en jaque al medio ambiente.
Según ha explicado a EFE el abogado del Comité de Pesca, Vincent Brengarth, los demandantes exigen la paralización inmediata de los trabajos ante «la reiteración de los diversos actos de contaminación» y por «la gravedad de los riesgos medioambientales». Según explican, la suspensión debería mantenerse mientras dure una investigación preliminar que los demandantes también quieren que abra la Fiscalía.
Este movimiento pone en jaque uno de los parques eólicos marinos como los que Iberdrola quiere poner en marcha en las costas gallegas. Ailes Marines inició en mayo los trabajos para levantar 62 aerogeneradores de 8 megavatios cada uno (496 megavatios en total) en un área de 75 kilómetros cuadrados frente al cabo Fréhel, a 16,3 kilómetros de la costa con la vista puesta en que esté operativo en 2023.
Jaque al mayor encargo de Navantia Fene
Los aerogeneradores se asientan sobre 62 jackets y pilotes que serán fabricados por la alianza de Navantia y la asturiana Windar. El astillero de Fene es el encargado de asumir este contrato, el mayor de su historia en la eólica marina (con un valor total de 350 millones de euros), y está previsto que genere 1.000 puestos de trabajo directos en Galicia y Asturias.
Navantia Fene también se perfila como la gran favorita para asumir parte del contrato de Iberdrola para sus parques eólicos marinos en el norte de Galicia. En concreto, la compañía ha reiniciado los trámites de exposición pública de sus parques eólicos San Cibrao y San Brandán, ubicados a menos de 13 kilómetros del Cabo Ortegal y de la costa de Cedeira y Cariño, respectivamente. Cada uno de ellos contará con una potencia instalada de 490 megavatios, lo que ha puesto en pie de guerra a las cofradías de pescadores de Galicia, que consideran que estos proyectos ponen en jaque uno de sus principales caladeros.