Reunión con Sandra Ortega y llamada a la gestoría: así reparte los bonus Rosp Corunna
La hija de Amancio Ortega mantiene reuniones con su número dos, antes José Leyte y ahora José Antonio Fresnedo, tras las que se comunican a una gestoría los incrementos de sueldo y los incentivos
La guerra judicial que emprendió Sandra Ortega contra su ex número dos, José Leyte, permite conocer detalles del funcionamiento interno de Rosp Corunna. Por ejemplo, la manera en la que el grupo reparte los incentivos entre sus ejecutivos. La querella presentada por la hija de Amancio Ortega contra el antiguo gestor de su fortuna por apropiación indebida, y el auto que archivó la causa el pasado enero en el Juzgado de Instrucción número 8 de A Coruña, muestra que las tablas salariales de la compañía se incumplían o reformulaban todos los años.
Sandra Ortega mantenía una reunión con José Leyte en la que acordaban el incremento salarial y el incentivo a percibir por el directivo. El ex número dos de Rosp Corunna se encargaba de trasladar los cambios en las remuneraciones a la gestoría externa que elaboraba las nóminas. Una vez confeccionadas las nóminas, estas volvían al grupo donde la parte administrativa las incorporaba a la contabilidad de la empresa.
Sandra Ortega levanta acta
Esta mecánica es la misma que se sigue ahora con José Antonio Fresnedo, que ocupó el puesto de José Leyte tras su cese en 2020. La única diferencia, según declaró el propio ejecutivo ante el juez, es que «se hace un acta que firman ambos donde se recogen las modificaciones acordadas”. Sandra Ortega acusaba a Leyte de comunicar a la gestoría cuantías mayores a las acordadas con ella y de apropiarse de casi 3 millones de euros valiéndose de esa práctica. El juzgado no ve indicios de delito ya que la inversora también tenía acceso a la información sobre el salario de Leyte en las nómicas y en las cuentas anuales del grupo, que llevaban su firma.
Otra trabajadora de Rosp Corunna que declaró como testigo explicó que “Sandra tenía con cada uno una reunión individual donde les informaba de la subida del salario y del incentivo que le iba a dar ; el incremento que le comunicaba Sandra es el que luego se reflejaba en la nómina”.
Los incentivos
La resolución judicial destaca que las tablas salariales en las que se apoyaba Sandra Ortega para demandar a Leyte eran, en realidad, «documentos de trabajo que se iban modificando, no documentos definitivos». «Prueba de ello es que, por ejemplo, existen dos tablas del año 2015, del año 2016 y dos también del año 2017 ; no existen del año 2018 y hay tres del año 2019, y tienen errores o no coinciden los salarios ( retribución fija) de algún empleado», asevera.
Según el auto, «los incentivos que figuran en las tablas, a veces, no coinciden con los que se mandan por e-mail a la gestoría y no sólo respecto al Sr. Leyte». Estos bonus, recogidos en la resolución judicial, oscilan entre los 550.000 euros el más elevado, y los 18.000 euros, el más pequeño que refleja el auto.