Repsol muestra sus flaquezas a los inversores (y le premian)

A veces, todo es tan sencillo como enseñar las cartas con las que se jugará. Repsol lo ha hecho esta semana ante los analistas, en dos encuentros, en Madrid y Londres, en los que se ha desnudado. La compañía que preside Antoni Brufau ha mostrado las flaquezas y dificultades que lastrarán los resultados del primer trimestre, y pese a que los analistas han empeorado previsiones, los inversores han premiado a Repsol, que ha rebotado cerca del 3% en bolsa en dos días.

La petrolera dirigida por Josu Jon Imaz tuvo una cena con analistas en Madrid este lunes, seguida de un almuerzo en Londres el martes. En estos encuentros, la compañía española explicó los planes de futuro de la compañía –lo que puede contar, puesto que está trabajando en un nuevo plan estratégico– , y que también había comentado en un encuentro para presentar los resultados de 2017.

Pero el objeto de la reunión era hacer balance de las cifras de producción y de la evolución de las principales magnitudes del primer trimestre. Se trata de un primer adelanto de los resultados: precio del crudo, márgenes de refino, impacto de los tipos de cambio, etc. Estas cifras, que publicó en la CNMV, muestran un incremento de la producción pero una caída del negocio downstream –todo lo que no es exploración y producción– a causa de diversos factores.

En concreto, según los analistas, se espera una caída cercana al 20% del negocio downstream, que aporta el 57% del ebitda de Repsol, respecto al primer trimestre de 2017. Las causas son principalmente tres: cae el margen de refino; las divisas, que unas veces juegan a favor y otras en contra, esta vez ha sido en contra, y las paradas de mantenimiento en alguna planta, algo que suele hacerse y que es coyuntural.

Repsol sube un 3% en dos días tras explicar a los analistas que el primer trimestre no fue tan bueno como se esperaba

Con estos factores, pese a la subida de la producción, varias casas de análisis han hecho informes en los que prevén unos resultados algo inferiores en el primer trimestre. Pero pese a que es, a priori, una mala noticia, no ha sido castigada por los inversores. Al contrario. Repsol, que había bajado en bolsa un ligero 0,2% en la jornada previa al encuentro, subió al día siguiente, el martes, el 2,1%, y el miércoles el 0,69% con el IBEX en rojo.

Lo que han valorado positivamente es que los factores que han perjudicado el primer trimestre de Repsol son coyunturales. Por ejemplo, si se cierra por mantenimiento una instalación, ya no hay que hacerlo en todo el año. También que el precio del petróleo sube –este miércoles tocó máximos desde 2014–, lo que está impulsando a todo el sector y hace que las perspectivas de futuro sean positivas.

Respecto a perspectivas, animó a los analistas e inversores al recordarles que recibirá 3.800 millones por el 20% de Gas Natural, que dedicará a crecimiento orgánico e inorgánico, lo que dibuja un futuro esperanzador, con una Repsol más diversificada.

Pero para explicar la subida de Repsol en los últimos dos días no puede olvidarse un factor estratégico y especulativo. Varios analistas recomendaron comprar al esperar una posible bajada por los resultados: comprar más barato para poder sacar luego más beneficios. El problema en esta ecuación es que no bajó.