Rebelión sindical contra los cajeros autoservicio de Zara
La CIG inicia en A Coruña una campaña informativa para advertir de las consecuencias que las máquinas autocobro de Inditex pueden tener en el empleo
Zara se ha buscado un conflicto laboral a costa de una de sus últimas innovaciones. Los cajeros autocobro han provocado ya las primeras quejas de la plantilla y de organizaciones sindicales como la Confederación Intersindical Galega (CIG), que alertan de las consecuencias que estos sistemas pueden tener en el empleo.
En concreto, CIG-Servizos ha anunciado el inicio de una campaña contra Zara España en la provincia de A Coruña que consiste en el reparto de información en los comercios de Zara y Lefties del centro comercial Marineda City, uno de los más grandes de España y campo de pruebas de la multinacional textil, para solicitar la colaboración de la clientela, a la que piden que “antes de pagar en una caja de autocobro piense primero en los puestos de trabajo que se pierden aumentando los millones de beneficios de Inditex a cuenta de nuestra precariedad y de la pérdida de puestos de trabajo en el futuro”.
“Sabemos que este es el principio y que Inditex intentará implantar este sistema paulatinamente en el resto de sus cadenas”, advierten Esther Paz Lestón y Miriam Rego, del comité de empresa.
Prima el beneficio
En Marineda City, la compañía fundada por Amancio Ortega ha instalado 14 cajas de autocobro en las que, como denuncia Carminha Naveiro, también miembro del comité, “las clientas hacen las funciones de las trabajadoras, autocobrando y autoemboslando su propia compra, ahorrándole así a Inditex la contratación de cajeras”.
En este sentido, recuerdan que desde CIG solicitaron a la dirección de Zara España la retirada de estos dispositivos porque “todas vemos como la avaricia de las grandes empresas como Inditex, en vez de revertir los millones de beneficios en la creación de puestos de trabajo en las propias tiendas, los destruyen para seguir ganando miles de millones”.