Reactivación ‘a medias’ de la térmica de Endesa en As Pontes
El Ministerio para la Transición Ecológica da el visto bueno a Endesa para el cierre de sus dos ciclos inactivos, pero condiciona la suspensión de los otros dos, de 700 MW, a la llegada de las ayudas de cogeneración e interrumpibilidad
La térmica de Endesa en As Pontes, que solicitó hace casi dos años el apagón de la central en medio de las políticas europeas de descarbonización y lleva paralizada de forma efectiva desde hace meses, deberá estar lista para un hipotético rearranque a medias ante el temor a un desabastecimiento energético este invierno.
Así se desprende de la comunicación efectuada esta mañana por el Ministerio para la Transición Ecológica, que hace algo más de dos meses encargó al operador del sistema, Red Eléctrica, la actualización de un informe en que analizaba la situación energética del Estado y la necesidad de reactivar o no la térmica, algo que hasta ahora no parecía necesario.
Más que dar luz verde a una reactivación de la térmica, lo que hace en este momento el ministerio de Teresa Ribera es aprobar un cierre gradual de las instalaciones de As Pontes, condicionado en todo caso por la situación energética.
Luz verde al cierre… pero con condiciones
En este contexto, el Gobierno central ha dado luz verde al cierre de los dos grupos de la térmica de As Pontes que están inhabilitados y que no podrían volver a rearrancar a no ser con una fuerte inversión. No obstante, indica que los otros dos grupos de la térmica coruñesa, que suman unos 700 MW, deben quedar listos para su reactivación si fuese necesario y así lo solicitase el operador energético hasta que se produzcan dos circunstancias: la puesta en marcha por parte del Ejecutivo de las ayudas de cogeneración y la vuelta de la subasta de interrumpibilidad de los grandes consumidores eléctricos. En resumen, el Gobierno acuerda un cierre gradual y con condicionantes.
La decisión que, finalmente, el Gobierno central toma con As Pontes es muy similar a la que adoptó con el cierre de otra de las térmicas del grupo de José Bogas, en este caso en Litoral, Almería.
Reunión de Ribera con Endesa
La vicepresidenta Ribera se reunió este lunes con el consejero delegado de Endesa, José Bogas, con el futuro de la central y sus trabajadores sobre la mesa, una vez recibido el informe del operador de la red eléctrica sobre la solicitud de cierre de la planta presentada por la energética.
Aunque el Ministerio ya contaba con un informe de REE elaborado en 2020 para autorizar el cierre de los cuatros grupos de la central de carbón, con unos 350 MW cada uno, en la primavera de este año decidió solicitar un nuevo informe, a la vista de las tensiones provocadas en los mercados energéticos por la guerra en Ucrania y la elevada exportación de electricidad provocada por la sequía y la indisponibilidad de buena parte del parque nuclear francés.
El gabinete dirigido por Teresa Ribera indicó que este segundo informe de REE contempla escenarios no previstos anteriormente, con distinta participación de la cogeneración y una elevada y constante exportación a los países vecinos.
Así, el análisis revela «la conveniencia de cerrar los dos grupos inoperativos y de que el cierre de los otros dos quede condicionado al refuerzo de variables de disponibilidad de potencia en el sistema eléctrico mediante diversas medidas que se están poniendo en marcha, como el aumento de la disponibilidad de la cogeneración o el establecimiento de un mecanismo de respuesta activa de la demanda».
El plan de Endesa en Galicia
La noticia ha hecho que Endesa enviase una nota de prensa en la que insiste en su compromiso con el tejido productivo gallego y destaca que tiene en marcha distintos proyectos previstos que suman 2.682 millones de euros y generarían más de 1.300 empleos.
La energética tiene en marcha plan de actuación «tiene como objetivo fundamental la sustitución de los 1.400 megavatios de carbón de As Pontes por 1.300 renovables e incluirá además el plan de desmantelamiento de la central, la instalación de nuevos proyectos industriales en el emplazamiento de la térmica» o el «impulso logístico» a su terminal portuaria de Ferrol.
La compañía también ha destacado que todos sus empleados «se van a recolocar en otras áreas, el desmantelamiento, los planes de futuro o se acogerán a salidas voluntarias«.
Al respecto, la compañía ha resaltado que el desmantelamiento tendrá una duración estimada de cuatro años y contempla un plan de formación que capacitará a las más de 130 personas que participarán en estas tareas, primando el empleo local; la licitación está preparada y solo pendiente de la recepción efectiva de la resolución de cierre.
Energía para PPAs
Sobre la implantación de «nuevos proyectos renovables», ha aludido en su nota Endesa a la creación de hasta 2.300 empleos durante la construcción de proyectos eólicos que alcanzarán los 1.300 megavatios y otros 274 «directos durante los 25 años estimados de vida útil de los parques».
Igualmente, ha avanzado que la «electricidad producida respaldará proyectos industriales de Sentury Tire» anunciados para el entorno de As Pontes y también incidirá en «un importante preacuerdo de compraventa de electricidad con Alcoa«, sobre el que ha precisado que ya ha solicitado a la Xunta que sea un plan de «carácter estratégico».
Junto a ello, Endesa también hace hincapié en en acuerdo con Ence, que prevé la cesión de 45 hectáreas de terreno del antiguo parque de carbones, donde esta empresa invertirá 355 millones de euros para una bioplanta para la recuperación, desarrollo y producción de fibras naturales recicladas a partir de papel y cartón recuperado. El desarrollo de esta iniciativa permitirá la creación de 150 puestos de trabajo directos y 400 indirectos.
Además, en su comunicación a medios tras el anuncio del Ministerio del cierre gradual de As Pontes, insiste Endesa en que también mantiene su plan para desarrollar una central de hidrógeno verde de hasta 100 MW de electrolizador que se abastecerá «con proyectos energéticos de la zona que ya cuentan con derecho de conexión».