La minera de Varilongo facturará casi 160 millones con su wolframio
La australiana Rafaella Resources invertirá 6 millones en la reapertura de la mina y prevé ingresar más de 30 millones anuales con el wolframio extraído
La reapertura de la histórica mina de wolframio de Varilongo (Santa Comba) está cada vez más próxima. La compañía australiana Rafaella Resources, dueña de los derechos mineros sobre esta explotación desde que a mediados de 2018 sellase la compra de Galicia Tin & Tungsten, ha detallado los resultados de su estudio de factibilidad en el que revela que podría llegar a facturar hasta 158 millones de euros con la venta de minerales del emblemático yacimiento.
Así lo ha revelado la compañía en un documento remitido al regulador de la bolsa australiana, en el que el director de la compañía, Steven Turner, asegura que los resultados obtenidos son “excepcionales”, ya que la tasa de retorno del proyecto rondaría “el 156%”.
Distintos escenarios
La minera de Varilongo detalla varios escenarios en función del entorno de precios de minerales (se mueven en una horquilla de entre 180 y 300 dólares la tonelada métrica de wolframio y en torno a los 19.000 dólares la tonelada de estaño) y de los ritmos de producción. El escenario base de la compañía pasa por extraer cada año un total de 1,3 millones de toneladas de minerales con una concentración de wolframio del 0,148% de este yacimiento .
A este ritmo, la compañía lograría extraer un total de 604.100 unidades de toneladas métricas de wolframio y 572 toneladas de estaño con las que facturaría 117 millones de dólares (unos 97 millones de euros al cambio actual) y alcanzaría un ebitda de 47,4 millones de dólares (unos 39,5 millones de euros) a lo largo de cinco años.
Inversión de seis millones
Además de este escenario, la compañía esboza otro que tilda de “optimista” bajo el cual lograría facturar 158 millones de euros gracias a que el proyecto contaría con un año y más de vida (seis y medio) y colocaría el wolframio en el mercado a un precio de 300 dólares la tonelada métrica. En este caso el ebitda se dispararía hasta los 91,3 millones de dólares (75,4 millones de euros).
La cifra que sí permanece sin cambios tanto en un escenario como en el otro es el de la inversión que lleva aparejada el proyecto. Rafaella Resources tiene previsto dedicar 5,9 millones de euros a la puesta en marcha de su planta para triturar, procesar y clasificar los minerales extraídos.
El pasado marcado por Sofindus
La compañía asegura que ya ha iniciado la construcción de la planta de procesamiento para poner en marcha la primera fase de extracción de este yacimiento en 2021. “La producción en los tres primeros años está limitada por el requisito de operar dentro de la mina a cielo abierto existente y cuyos derechos tiene Canteira da Minas (…). La fase 1 está diseñada para asegurar que el proyecto puede ser puesto en marcha para lograr rápidos flujos de caja, otorgando suficiente tiempo a Galicia Tin & Tungsten (propiedad de Rafaella Resources) para solicitar los permisos para acceder al resto de recursos explotables”, revela la compañía en el documento remitido a inversores.
De esta forma, Rafaella Resources se reafirma en su plan de volver a operar ya en 2021 este histórico yacimiento que fue explotado por Sofindus (que posteriormente proveía al ejército nazi de este mineral clave para material bélico) y que fue clausurada en 1985, marcado un punto y seguido en esta mina que fue llevada al cine con la película Lobos Sucios.