Puentes pierde una obra de 63 millones por el veto a su dueño chino
Lituania aparta al grupo gallego de la construcción del puente más largo de los países bálticos al considerar que amenaza la seguridad nacional
La entrada de capital chino en Puentes y Calzadas no solo supuso que la tercera constructora gallega cambiara de manos. También está teniendo consecuencias imprevistas en el negocio internacional del grupo, que acaba de perder uno de sus grandes contratos en Europa.
Más que perderlo, ha sido apartado de la obra. El Gobierno de Lituania ha decidido que representa una amenaza para su seguridad nacional y que no podrá realizar la construcción del puente más largo de los países bálticos, un contrato de 62,5 millones de euros.
Puentes se adjudicó la obra en el concurso que puso en marcha Lithuanian Railways LTG. El pasado diciembre, sin embargo, el Ejecutivo lituano dictaminó que “el contrato planificado de LTG Infra con el postor mejor calificado […] no cumple con los intereses de seguridad nacional”, según recogió la Radio Televisión Nacional Lituana.
Esta actuación, que cuenta con fondos europeos, permitiría a la empresa gallega desplegar un puente ferroviario de 1.500 metros sobre el río Neris. Sin embargo, el veto a su propietario chino la aparta de la obra.
La conexión china
Aunque mantiene su estructura de gestión, Puentes y Calzadas está controlada por China Road and Bridge Corporation, la quinta mayor constructora china. Esta corporación, a su vez, está vinculada a China Communications Construction, una importante empresa estatal china que ha estado bajo sanciones estadounidenses desde agosto de 2020 debido a sus vínculos con el ejército.
Esta estructura de la propiedad es la que llevó a Lituania a vetar al grupo gallego. En declaraciones a El Confidencial, la empresa aseguró que va a pelear por recuperar el contrato.