Povisa pedirá auxilio a la banca ante las pérdidas del hospital
El hospital Povisa admite “tensiones de liquidez” y dificultades para continuar su actividad por el gasto en medicamentos que no le devuelve la Xunta
Hace algo menos de cuatro años que Povisa, el más importante hospital privado de Galicia, comenzó una tendencia negativa en sus resultados que ha hecho que el centro hospitalario, llegado 2018, sufra “tensiones de liquidez que podrían impedirle hacer frente a sus obligaciones exigibles a corto plazo”.
Así lo expresa en su memoria el Grupo Nosa Terra 21, un conglomerado del empresario José Silveira Cañizares que es propietario del centro sanitario, cuya actividad representa el 14% de la cifra de negocio y el 7% de los activos del holding.
Povisa atribuye el problema de liquidez al concierto con el Sergas
Povisa no es un hospital privado al uso, pues el 77% de su facturación procede de los servicios que presta a la Xunta como complemento de la asistencia sanitaria pública en el área de Vigo. El concierto que formaliza esta relación, renovado en 2014, es el que está empujando hacia la falta de liquidez al hospital a causa de la no compensación de determinados costes en los que incurre por la asistencia a los pacientes derivados de la sanidad pública.
Estos costes que el Sergas no abona se corresponden a “medicación hospitalaria de disensión ambulatoria que la sociedad está dispensando a pacientes incluidos en la población de referencia del concierto”. Povisa llegó a presentar en marzo de 2017 una reclamación administrativa por este asunto sin obtener respuesta del Gobierno gallego.
La dirección del grupo admite negociaciones con Sanidade “con la finalidad de obtener el reequilibrio económico de la actividad realizada bajo el citado concierto con el Sergas, lo que contribuiría a la mejora de los resultados y a garantizar la continuidad de sus operaciones”.
Silveira llamará a la puerta de los bancos
Mientras la situación no se solventa, el grupo de José Silveira admite que su rama de actividad hospitalaria encadena números rojos, 3,9 millones en el último ejercicio, y que se encuentra “en una situación compleja de cara a su evolución en el futuro, si bien la dirección del hospital está aplicando ya diferentes acciones para garantizar la viabilidad”.
Una de estas medidas es llamar a la puerta de los bancos en busca de una nueva financiación que alivie los problemas de liquidez. “Para hacer frente a las necesidades de tesorería a corto plazo derivadas de la situación descrita, los administradores tienen intención de acudir a las entidades financieras al objeto de obtener nueva financiación”, explica Nosa Terra 21.
Povisa: más gasto y menores ingresos
Del mismo modo, también se está optimizando la estructura para reducir costes, toda vez que “la reducción de la población asignada durante el ejercicio” por el Sergas ha rebajado los ingresos mientras que “el envejecimiento” de la misma ha incrementado los gastos.
En todo caso, dice la compañía, “los administradores consideran que las acciones permitirán continuar normalmente sus operaciones y hacer frente a los pagos de deuda en los plazos establecidos”.
Povisa tiene detrás a un grupo, también propietario de la naviera Elcano, que facturó casi 740 millones en 2017 y obtuvo más de 25 millones de ganancias. Nosa Terra arrastra, sin embargo, una deuda de 464 millones, de los que 193,5 son a corto plazo.